Con la Diócesis de Iztapalapa, erigida canónicamente este lunes 4 de noviembre, la Iglesia en México tiene 96 Iglesias particulares, y terminará la semana con 98, luego de que oficialmente sean proclamadas las diócesis de Xochimilco y Azcapotzalco, todas dentro del territorio de la Ciudad de México.
Este día también fue consagrado, a sus 74 años de edad, el primer obispo de esa diócesis, Jesús Antonio Lerma Nolasco, quien durante casi una década estuvo al frente de la séptima vicaría episcopal de la Arquidiócesis de México, territorio que ahora se separa para convertirse en la Diócesis de Iztapalapa.
La celebración eucarística estuvo presidida por el nuncio apostólico Franco Coppola, y concelebrada por una veintena de obispos, entre ellos el arzobispo de México, cardenal Carlos Aguiar Retes, y el arzobispo emérito, cardenal Norberto Rivera Carrera. También estuvieron presentes quienes dirigirán el destino de las diócesis de Xochimilco y Azcapotzalco, los obispos Andrés Vargas y Adolfo Castaño.
Con 131 sacerdotes, distribuidos en 75 parroquias y sus respectivas capillas y rectorías, la Diócesis de Iztapalapa abarca 116 kilómetros cuadrados y cuenta con un millón 827 mil habitantes.
En su mensaje a los miles de asistentes a la celebración, desde un templete colocado en el atrio de la ahora Catedral del Señor del Santo Sepulcro, Lerma Nolasco agradeció a los cardenales Aguiar Retes y Rivera Carrera el haber establecido las condiciones para la creación de la nueva diócesis.
El obispo confió en que el presbiterio, aunque pequeño, sabrá asumir los desafíos que enfrentarán como Iglesia autónoma. “Señor Nuncio, hágale saber al Papa que asumimos estos retos, y que no tenemos miedo a ensuciarnos las manos para servir a los pobres”, dijo.
Al dirigirse a sus sacerdotes, dijo agradecer y valorar su trabajo diario a favor de los miles de católicos que viven en esta alcaldía, una de las más pobladas de la capital del país, y con marcados problemas de pobreza y delincuencia.
De acuerdo con una entrevista difundida por la Arquidiócesis de México, Lerma Nolasco asegura que para atender estas dos realidades, la Diócesis de Iztapalapa ya tiene un camino andado, toda vez que desde que era vicaría episcopal los planes pastorales contemplaban estos flagelos.
“La pobreza aquí es una realidad, sobre todo en los decanatos que se encuentran en la periferia, pero es una pobreza desde la cual se comparte lo que se tiene. Y en cuanto a la violencia, lo que nos toca hacer es insistir más a los padres de familia en inculcar la fe a sus hijos desde pequeños (…) la Pastoral Familiar fungirá un papel muy importante, y por ello recientemente 55 matrimonios acaban de terminar un máster en familia”.
Este martes 5 de noviembre será erigida la Diócesis de Xochimilco y el jueves 7 la Diócesis de Azcapotzalco.
Foto: Arquidiócesis de México