“No nos quedemos solo con el lamento de lo que hemos perdido; hay que mostrar más fidelidad que lamento”. De esta manera se ha pronunciado el vicepresidente de la CONFER, Jesús Díaz Sariego, en el marco de la XXVI Asamblea General de la CONFER, bajo el lema ‘Sabed cuál es la esperanza a la que habéis sido llamados’.
El superior provincial de los dominicos en España ha invitado a “no despojarse de la Sagrada Escritura nunca, porque no podemos hablar de la Vida Religiosa sin ella”, durante su alocución en la conferencia titulada ‘La reestructuración de la vida y de la misión’.
“En el momento en el que estamos pueden ser signos de muerte el haber tenido un colegio y ya no, el que un hermano fallezca y deje la institución a la que siempre ha pertenecido… Desde el Evangelio se nos ayuda a verlo de otra manera. A los ojos de Dios es una oportunidad y si lo leemos desde la fidelidad esa oportunidad se vuelve riqueza”, ha afirmado.
En este punto, Sariego ha invitado a ponerse en estado de conversión. Personal e institucional. “La fidelidad siempre exige conversión, un renovarse constantemente. Más que evaluarse, es renovarse interiormente”, ha planteado.
Antes de plantear cualquier reestructuración de vida y de misión, ha pedido hacerse una pregunta: “¿Cómo late el corazón de mi hermano?”. “A veces hemos olvidado esto. Quizá hemos olvidado el cuidado de la vocación”, ha aseverado.
Por otro lado, también ha puesto sobre la mesa otra palabra: fraternidad. “Con carencia de vida fraterna no puede haber reestructuración”, ha indicado.
En relación a los hermanos más jóvenes, otra pregunta al aire: “¿Qué novedad de entrega trae Dios en los hermanos más jóvenes?”. “Entre nosotros hay déficit de experiencia de Dios para el momento que la actualidad nos exige. Los jóvenes tienen que escucharnos pero nosotros a ellos también. Ellos nos dicen que perciben carencia de fe. No quiere decir que no la haya. Y es porque hemos dejado de escuchar suficientemente”, ha reconocido.
En una invitación a la esperanza, Sariego ha instado a no pensar en las vocaciones desde la carencia. “Antes tenía 100 novicios y ahora 1. Desde la teologalidad del Evangelio, si lo vemos como oportunidad responderemos de manera diferente”, ha comentado, para luego recalcar que “el Espíritu quiso antes muchas vocaciones, para ese tiempo, para expandirnos en otros continentes. ¿No nos estará diciendo el Espíritu que lo que quiere ahora es una levadura diferente y para eso no se requiere 100, sino 10?”. Y es que “se trata de que el mundo, más secularizado, requiere la levadura de la escasez cualificada”.
Antes de concluir, el vicepresidente de CONFER se ha preguntado si las reestructuraciones en España se han hecho bien. “No hemos tenido en cuenta el conjunto. En algunos lugares ha desaparecido la Vida Religiosa. No nos hemos coordinado y hemos abandonado parte de la Iglesia española a la que queremos servir”. Pero esta crisis no viene de ayer, ha recordado: “Cuando las instituciones están en todo su esplendor están generando una crisis. Esta crisis viene de lejos, pero no nos dimos cuenta porque nos veíamos autosuficientes y nos autoengañamos”.