La orden de captura internacional emitida por la fiscal argentina María Soledad Filtrín Cuezzo el jueves 21 de noviembre contra Gustavo Óscar Zanchetta, antiguo obispo de la diócesis de Orán, acusado de presuntos abusos sexuales con dos seminaristas, no ha sido considerada procedente por el juzgado que lleva el caso.
“Al pedido de declaración de rebeldía y orden de captura internacional del imputado, se proveerá una vez vencida la fecha para la cual fuera citado y recepcionadas que fueran la constancias de notificación en el domicilio fijado en el proceso”, según la respuesta que se ha dado a la petición de la fiscal el mismo jueves y a la que ha tenido acceso Vida Nueva.
De esta manera, la jueza considera que no ha lugar a la solicitud elevada por la fiscalía tras considerar esta que Zanchetta no respondía a las llamadas telefónicas y varios correos electrónicos para notificarle las actas de la acusación.
Esclarecer toda la verdad
En este sentido, el mismo día 21, el abogado y portavoz del obispo argentino emitió un comunicado en el que, en respuesta a “una supuesta rebeldía por no haber respondido”, se asegura que “a pesar de que en el domicilio radicado en Argentina no se ha recibido notificación alguna, monseñor Zanchetta se considera notificado tal y como se le indicaba en el mismo mensaje de correo electrónico en el que se le advierte que la recepción del mail comportaba la notificación y sin solicitar la confirmación ni ninguna otra notificación por su parte”.
Además, se señalaba en este comunicado que “no alcanzamos a entender que se califique su actitud procesal en términos de rebeldía, ya que siempre ha colaborado con la justicia”. Finalmente, en nombre de Zanchetta, se manifestaba que el exobispo de Orán “es el primer interesado en que quede esclarecida toda la verdad y puedan verse así limpiados su buen nombre y fama”.