“Si en mi tarjeta pusiera Emilio en lugar de Emilia, qué distinta habría sido mi vida”. Estas palabras de Emilia Pardo Bazán reflejan a la perfección una realidad silenciada. Por un lado, la de las numerosas mujeres que, aun teniendo un papel enormemente relevante en la Historia, han sido olvidadas. Por otro lado, invitan a reflexionar acerca de qué ha de hacer una mujer para que su nombre sea reconocido y recordado como se recordaría el de un hombre. Edith Wharton, Natalia Ginzburg, Kathryn Bigelow, Barbara Sukowa, Golda Mair, Dorothty Day… Es posible que estos nombres no le suenen. O tal vez sí, y deberían. Porque todas ellas han sido, en distintos campos, protagonistas del siglo XX.
Sin embargo, lo que tienen en común es precisamente el hecho de que la Historia, si bien no las ha olvidado, ha subrayado como más relevantes los de otros coetáneos masculinos. Atendiendo a esta premisa, y prestando atención a todas sus historias, el sacerdote y profesor de la Universidad de Navarra (UNAV) Onésimo Díaz ha publicado su último libro, titulado ‘Mujeres protagonistas del siglo XX’ (Base), un ensayo que muestra el pasado siglo a través de mujeres, que han dejado constancia documental en su hacer público, en su obra escrita y en sus realizaciones cinematográficas.
“Este libro nace porque llevo años dando clases de Historia en la UNAV, impartiendo asignaturas diferentes pero siempre relacionadas con la historia de España y del mundo. Al leer manuales, biografías y libros de memorias sobre la historia del siglo XX, apreciaba que la mujer aparecía o poco tratada o eclipsada, incluso en episodios donde era evidente que había ejercido un papel importante”, explica Díaz a Vida Nueva. “Eso me llevó a ir tomando notas y apuntando momentos de la historia del siglo XX donde destacaba el papel de la mujer, y hubo un momento en el que me decidí a escribir este libro porque es realmente necesario”, subraya.
Su papel en la Iglesia
Así, Díaz ha concentrado en casi 300 páginas la labor de numerosas mujeres que, por su hacer, tuvieron un impacto relevante en la Historia y, por ello, en el mundo actual. Sin olvidar, claro está, uno de los ámbitos donde el debate sobre la mujer está más en boga: la Iglesia. “En el libro dedico dos apartados al tema de la mujer en la Iglesia”, dice. “Por una parte, reflexiono acerca de cómo ha sido tapada antes del Concilio Vaticano II, y dedico unas pocas paginas a Juan XXIII, que es un Papa que habla de manera muy clara acerca del papel de la mujer y de su derecho al trabajo, ya que en algunos ambientes se ponía en cuestión el tema de que la mujer tuviera acceso libre al trabajo porque rompía el papel tradicional de la madre y esposa siempre en casa”, añade.
“Juan XIII, antes del Concilio, en un documento muy bonito habla de todo esto”, asevera. Después vendría, firmada por Pablo VI, ‘Gaudium et spes’, en la que se hace referencia de forma muy clara al derecho de la mujer a la educación y a la cultura, no solo en occidente sino en todo el mundo. “Juan Pablo II en ‘Mulieris dignitatem’ habla del genio femenino, del impacto de la mujer en la historia y la sociedad y de cara al futuro”, indica Díaz.
En cuanto al papa Francisco, Díaz considera que es “muy consciente de la necesidad de la mujer en la Iglesia, que cada vez va teniendo más protagonismo”. “Me encantaría que escribiera un documento específico acerca de la mujer. Espero que lo haga, porque sería un documento muy importante”, señala.
Un homenaje
En la portada aparece una fotografía de Dorothy Day. Esta mujer, pacifista durante la I Guerra Mundial, estuvo una semana en la cárcel en huelga de hambre por manifestarse contra el conflicto. “Cuando salió se dedicó como enfermera a cuidar de los soldados heridos”, explica Díaz. Allí encontró la fe, de la mano de una enfermera católica. “En los años 30, cuando había millones de parados en EEUU, esta escritora y periodista monta de la nada un periódico católico para dar de comer a periodistas y voceadores. Con el dinero que saca crea granjas y escuelas, trabajos para la gente sin techo”, afirma.
Son numerosos los casos como este durante el siglo XX. “Cuando presenté el libro en Madrid leí un artículo que hablaba de los grandes genios del siglo XX, y eran todo hombres, cuando realmente hay muchísimas mujeres que han sido igual de sobresalientes y seguimos tapándolas”, subraya, “este libro es una especie de homenaje a todas ellas”.
