“Estoy convencido de que ninguno de vosotros es ajeno al acontecimiento que en estos días se está celebrando en España; me refiero a la Cumbre del Clima, de la que nos van a llegar reflexiones y mensajes de muy diverso signo y de la que se espera una mayor toma de conciencia mundial de los grandes problemas y peligros ecológicos que nos vienen, a causa de una forma de vivir que no piensa en la sostenibilidad del planeta”. Así comienza una carta del obispo de Jaén, Amadeo Rodríguez, en la que invita a los católicos a estar atentos a lo que se debatirá en la COP25.
Y es que, como subraya el prelado, los católicos “no somos ajenos a esta problemática que cada día crece más en la conciencia social de niños, jóvenes y adultos”. Por ello, señala que “debemos tomar conciencia de cada uno de los problemas y a colaborar y a apoyar las soluciones que necesite el rápido y escandaloso deterioro del planeta”. El primer paso para esto, como ha subrayado, no es otro que el de “saber reconocer, con los demás hombres y mujeres de la tierra, los errores, los pecados, los vicios y negligencias con los que dañamos la naturaleza”, ya que “solo así podremos arrepentirnos para cambiar tantas decisiones erróneas y egoístas”.
Ante la multitud de mensajes que se desprenden de los medios de comunicación ante la Cumbre del Clima, Rodríguez ha invitado a los cristianos a apoyar sus “juicios y valoraciones en la doctrina social de la Iglesia, que en el ámbito ecológico es especialmente rica e iluminadora”. Especialmente en la encíclica ‘Laudato si’, cuyo mensaje espera “que suene con fuerza en favor de una cultura social ecológica”.
Para los cristianos, esta encíclica de Francisco “ha de ser la mejor guía para movernos ante estos problemas y situaciones que nos van a poner de relieve, desde muchos puntos de vista, cuantos participen en esta cumbre, bien en delegaciones oficiales o en grupos alternativos, que también llamarán nuestra atención”. De hecho, ha invitado a “leer esta encíclica papal”, ya que ” quedaréis impregnados del espíritu cristiano con el que hay que analizar y valorar todo cuanto escuchemos”.
“Estemos muy atentos, de un modo especial, a cuanto escuchemos a la delegación de la Santa Sede, que estará encabezada por el cardenal secretario de estado, Pietro Parolin”, ha subrayado Rodríguez. “Para comprometernos con los grandes retos que hoy se nos plantean sobre el clima, necesitamos de una mística que nos anime y de unos móviles interiores que impulsen, motiven, alienten y den sentido a la acción personal y comunitaria”, ha añadido.
Y es que “la espiritualidad cristiana no está desconectada del propio cuerpo ni de la naturaleza o de las realidades de este mundo, sino que se vive con ellas y en ellas, y en comunión con todo lo que nos rodea”. “Se necesita, por tanto, una conversión ecológica, de la que brotará un claro compromiso con el mundo que nos rodea”, ha concluido el obispo.