La visita al Belén que el papa Francisco hace cada 31 de diciembre al concluir las vísperas de la solemnidad de santa María, madre de Dios, era hasta ahora uno de los mejores momentos para que los fieles se acercasen a saludar al pontífice. Francisco vive este momento de familiaridad de forma muy sencilla y cercana; aunque, este año, se ha generado un momento de tensión que se ha hecho viral.
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En la escena, el pontífice reprende a una peregrina de rasgos asiáticos que le agarra bruscamente de la mano y le atrae hacia la barrera de seguridad que protege el belén de la plaza. En esos momentos el Papa iba estrechando rápidamente la mano de algunos de los files presentes en la primera fila ya casi retirándose cerca de la basílica de San Pedro. Ante el apretón de la mujer, Bergoglio trató de soltarse llegando incluso a dar un manotazo a la mujer sin que tuvieran que intervenir los agentes presentes. En ese momento la banda de la Guardia Suiza en pleno estaba presente. En el vídeo se ve el momento exacto.
No es la primera vez que estos gestos del Papa argentino resultan bruscos ya que suele impedir que se le bese el anillo. En esta ocasión, en la transmisión televisiva completa se ve como el Papa se detiene y saluda con amabilidad y cariño a un buen numero de fieles, tanto antes como después de un momento de oración ante el belén.
