El Gobierno de Sánchez e Iglesias se ha comprometido a que las jóvenes, a partir de los 16 años, puedan abortar sin el consentimiento de sus padres. Así se desprende del acuerdo de Gobierno firmado por PSOE y Unidas Podemos – presentado el pasado 30 de diciembre -, en el que se afirma que se “favorecerá el acceso a la interrupción voluntaria del embarazo de todas las mujeres, en el sistema nacional de salud, en el marco de la ley de salud sexual y reproductiva de 2010″.
La norma a la que hace referencia el acuerdo fue limitada por PP en 2015, con la conocida como “contrarreforma de Gallardón”, en la que se impedía a las menores de edad interrumpir su embarazo sin el consentimiento paterno. Con la ley de plazos de Zapatero, sin embargo, las mujeres de 16 y 17 años podían hacerlo, con la única condición de haberlo notificado a sus progenitores a no ser que se alegasen graves conflictos en el núcleo familiar.
Ya en su programa electoral para las elecciones de abril de 2019 el PSOE se comprometía a “preservar la protección y el derecho a decidir sobre su maternidad a las mujeres de 16 y 17 años”. Del mismo modo, Podemos incluía esta promesa en su programa, por lo que resulta bastante probable que esta propuesta llegue al Consejo de Ministros.
Pero esta no es el único punto en el que PSOE y Podemos se han puesto de acuerdo en lo que al aborto se refiere. Para empezar, el documento contempla que se desarrollarán “políticas activas de educación y prevención de embarazos no deseados”, así como la necesidad de favorecer el acceso a métodos anticonceptivos y a la anticoncepción de urgencia.
Todo ello, con el único fin de intentar reducir la tasa de abortos, ya que, a pesar de la “contrarreforma de Gallardón”, desde 2016 se ha registrado un ligero incremento de los mismos. De hecho, solo en 2018 abortaron 95.917 mujeres, un 2,9% más que en 2016. Por último, el acuerdo asegura que se garantizará la “intimidad de las mujeres que acuden a las clínicas, su integridad física y moral, así como su derecho a la libre circulación”.