El Arzobispado de Madrid ha arrancado hoy una iniciativa de acompañamiento a las víctimas de abusos sexuales, así como de prevención desde la formación de sacerdotes y agentes de pastoral. Se trata de una propuesta nacida directamente del cardenal arzobispo Carlos Osoro, que busca aterrizar en la archidiócesis madrileña las directrices marcadas por el Papa Francisco.
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El proyecto se denomina “Repara”, es fruto de seis meses de trabajo y funciona como un acrónimo configurado a partir de los términos reconocimiento, prevención, atención y reparación a víctimas de abusos.
Más allá de las fronteras eclesiales
Coordinado por el profesor de la Universidad Pontificia Comillas, Miguel García-Baró, entre sus apuestas más innovadoras se encuentra un servicio de atención gratuito a toda víctima de abusos, independientemente de si ha sufrido las vejaciones en el seno de la Iglesia, en el ámbito familiar o en cualquier otro ámbito. Tampoco será condición el hecho de que el delito haya prescrito. “En esta materia, la Iglesia debe servir a la sociedad entera en todo lo que necesita, gratuitamente, transparentemente”, explica el coordinador del proyecto.
De esta manera, se busca ofrecer un servicio a toda la sociedad, más allá de las fronteras eclesiales. Para ello, se ha habilitado una oficina de acogida que estará abierta dos días a la semana (Santa Hortensia, 5, 1ª planta), además de habilitar un correo electrónico (atencionrepara@archimadrid.es) y un teléfono (618304666).
Plan personalizado
En una primera fase de acompañamiento se escuchará las necesidades de la víctima y se realizará un plan personalizado terapéutico, espiritual y jurídico por parte de un equipo multidisciplinar.
Hasta que la archidiócesis cuente con un protocolo propio de actuación ante posibles casos de abusos que se adecue a la realidad madrileña y al marco legislativo vigente, el proyecto “Repara” hará suyo las directrices establecidas por Escuelas Católicas, así como las líneas marco de la Conferencia Episcopal Española.
En lo que a los planes de formación se refiere, la archidiócesis madrileña contará con la colaboración de la Universidad Pontificia Comillas y el Instituto Teológico de Vida Religiosa de los misioneros claretianos para elaborar materiales y diversas sesiones que otorguen herramientas tanto para los presbíteros, catequistas, así como otros agentes de pastoral.