El Movimiento Católico Mundial por el Clima (MCMC), fiel a su compromiso con la “conversión ecológica”, anuncia que, a lo largo de este año, va a abrir una oficina en Madrid y contará con un equipo de trabajo fijo. Aquellos interesados en esta tarea pueden informarse en su página web.
Es un paso más allá a la hora de interpelar a la Iglesia española y ofrecer a las comunidades eclesiales locales un modo de encarnar la acción concreta en el cuidado de la Casa Común al que nos llama el papa Francisco en su encíclica Laudato si’.
El MCMC es una red internacional que integra a más de 900 organizaciones católicas de todo el mundo. Como explican sus impulsores en su web, estas entidades “trabajan juntas para desarrollar soluciones a la crisis climática. Somos guiados por el Espíritu Santo y encontramos gozo y apoyo en nuestra fe y en los demás. Actuamos a la vanguardia de los esfuerzos basados en la fe para proteger el medio ambiente, y nuestro trabajo es muy rápido, con múltiples proyectos y prioridades administradas diariamente”.
Pero la clave definitiva es que “disfrutamos de un entorno de trabajo colaborativo en el que todos están comprometidos a abordar la crisis climática con valentía y amor. Creemos, como dijo el papa Francisco en Laudato si’, que, ‘realmente, ¡se puede hacer mucho!’”.
A partir de ahora, Madrid es un nuevo haz de luz para los que, desde la pasión por el hombre y la tierra que todos habitamos, quieran comprometerse como sus custodios.