La decisión sobre eliminar todas las emisiones netas de carbono para 2045 que se debatirá en el Sínodo General de la Iglesia anglicana puede suponer una nueva forma de entender la gestión de la calefacción y el mantenimiento de los 40.000 edificios con los que cuenta en su patrimonio, entre ellos las catedrales más históricas.
Entre las alternativas, tal como ha publicado The Guardian, para lograr las cero emisiones estarían el uso de cojines calefactados en los bancos. Para ello, también se están implantando formas de medición del consumo energético de los edificios similar al que se hace con los electrodomésticos actuales.
No está todo por hacer. Ya se han cambiado muchas de las bombillas LED, la sustitución de los combustibles usados, la adquisición de vehículos eléctricos o el cuidado de la biodiversidad en los cementerios. También se están planteando nuevas formas de realizar los viajes internacionales.