A la Iglesia le preocupa la España vaciada. La Comisión Episcopal para el Patrimonio Cultural se ha propuesto “analizar y buscar soluciones” al fenómeno de la despoblación y su impacto, porque, como sostiene Pablo Delclaux, “afecta no solo al mundo rural, sino también a los cascos urbanos históricos, monasterios o museos poco visitados”.
Delclaux, director del secretariado de la Comisión no ha dudado en recorrer FITUR, la Feria Internacional de Turismo celebrada en IFEMA (Madrid) entre el 22 y 26 de enero, “buscando ideas por aquí y por allá”, como él mismo señala. “Y estoy encontrando ideas fantásticas –añade–, desde cómo poder abrir una iglesia que está vacía, cómo aprovechar las casas parroquiales que se cierran y convertirlas en casas rurales, que puede ser una ayuda económica para el pueblo. Son tantas cosas que podemos tener… como por ejemplo audioguías a través del móvil”.
En IFEMA, en el marco de FITUR, el director del secretariado de la Comisión narró la génesis de la preocupación por la España vaciada: “Hace unos meses entró en mi oficina el obispo de Barbastro-Monzón, Ángel Pérez Pueyo, muy preocupado, y me planteó el problema de cómo poner el patrimonio de la diócesis, que está a los pies de los Pirineos, con un románico maravilloso, al servicio de la España vaciada. Es decir, cómo ayudar, aunar esfuerzos, para que todo lo que tenemos sirva para que España no se vacíe y para que los pueblos que tengan pocos habitantes tengan un medio de vida y un apoyo económico, y no estén sufriendo”.
Fue en esa conversación con el obispo donde surgió la idea de estudiar el fenómeno y buscar soluciones desde dentro de la Iglesia: “A partir de ahí comenzamos a idear dedicarle una serie de jornadas, como la que organizamos todos los años. Pero este año vamos a hacer dos”, según Delclaux. La primera sobre Patrimonio Cultural de la Iglesia y el marco legislativo estatal y autonómico, es la anunciada para el 11 y 12 de febrero en el Aulario Papa Francisco: “Está destinado de forma más técnica a la España vaciada y qué podemos hacer con nuestro patrimonio, tanto material como inmaterial, para ponerlo al servicio de los pueblos. Cómo aunar esfuerzos entre la hostelería, los restaurantes, los productores de artesanía, de productos típicos, para salir adelante”.
En el mismo participará Julio Vinuesa, catedrático emérito de Geografía Humana de la Universidad Autónoma de Madrid, que pondrá en común sus “reflexiones sobre la despoblación”, que completará, entre otros, el arquitecto diocesano de Ávila, Carlos García Palomo, con una ponencia sobre Despoblación rural y crisis en la conservación de su patrimonio cultural.
Como detalla Delclaux, “los temas a tratar serán el análisis de la situación, el impacto de la despoblación en el Patrimonio de la Iglesia, la importancia del seguro en los edificios vacíos y las ayudas de la Unión Europea. Contaremos con una mesa redonda en la que expondrán diversas experiencias sobre cómo gestionar el Patrimonio ante este fenómeno en vistas a su mantenimiento y a la promoción de las zonas deshabitadas”.