La Iglesia de Francia ha abierto los archivos del clero a la Comisión Sauvé, encargada en el país de investigar los casos de abuso sexual a menores. Así, tal como informa RTL, además de recopilar testimonios de víctimas, la Iglesia ha puesto en manos de los investigadores toda la información que posee, para así poder esclarecer la forma en la que se han tratado estos crímenes en el seno de la institución y la evolución de la política de la Iglesia ante estos a lo largo del tiempo.
Como explica Valentin Favrie, responsable del archivo, se disponen de 6 kilómetros lineales de archivos, solo de papel. Es precisamente aquí donde están registrados los que en los años 50 y 60 se denominaron “casos dolorosos”, y donde está recogido lo que ocurrió con los curas pedófilos y cómo actuaron sus superiores.
Armar el puzzle
“Es muy raro que nos encontremos con archivos cuyo nombre revele que hay un caso de abusos”, ha señalado Philippe Portier, uno de los investigadores. Por este motivo, deben ir de archivo en archivo para armar el puzzle. “Esta es la primera vez que tenemos el derecho consultarlos”, recuerda su compañero Paul Airiau.
“En cada una de las cajas, hay una docena de archivos correspondientes a diez diócesis”, dice Portier. En ellos, los ‘casos dolorosos’ se refieren tanto a “sacerdotes con hijos, alcohólicos o con depresión”. “Y luego, de vez en cuando, un archivo que se refiere a un sacerdote pedófilo”, concluye Portier.
