Una vez más, y por segundo día consecutivo, el papa Francisco dedicó sus primeras palabras a los afectados por el coronavirus en la eucaristía matutina de la capilla de Santa Marta que, desde ayer se retransmite en ‘streaming’.
“Oremos por los enfermos, los agentes sanitarios, por tanta gente que está sufriendo por esta epidemia”, expresó el Papa desde el ambón al iniciar la misa. Sin embargo, Francisco fue más allá solicitó una misión específica a los presbíteros en esta lucha contra la pandemia que, solo en Italia supera se acerca a los 10.000 casos.
“Oremos juntos también por nuestros sacerdotes, para que tengan la valentía de salir e ir hacia los enfermos llevándoles la fuerza de la Palabra de Dios, de la eucaristía, y acompañar al personal sanitario y a los voluntarios en el trabajo que están desarrollando”, comentó.
Coraje ante las miserias
El Papa retransmite desde ayer la eucaristía diaria de su residencia vaticana de Santa Marta después de que el Gobierno italiano prohibiera celebrar cualquier eucaristía y funeral en todo el país hasta el 3 de abril como medida preventiva.
Durante la homilía, el Santo Padre hizo un llamamiento a “no tener miedo y tener coraje” para dejar de lado cualquier gesto de “vanidad” y presentarse ante Dios “con nuestras miserias y hablar con él”. Si el pasado lunes invitaba a presentarse ante el Señor con “nuestra vergüenza” como una actitud que refleja “nobleza”, hoy propuso “ir a su encuentro y no hacer como si no hubiésemos pecado”.