Francisco celebra 7 años como Papa con la discreción que le caracteriza (más en tiempos de coronavirus)

A las 19:05 h. del 13 de marzo de 2013 el humo blanco de la chimenea instalada en la Capilla Sixtina señalaba que los cardenales habían llegado a un acuerdo. Poco después, Jorge Mario Bergoglio irrumpía en una lluviosa tarde romana presentándose como venido “desde el fin del mundo”. Era el Papa número 266 de la historia de la Iglesia católica.

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Desde entonces, el 13 de marzo es una fecha señalada en la historia del pontífice y quienes le rodean; sin embargo, Francisco –como ocurre con el día de sus cumpleaños el 17 de diciembre o el día de su santo el 23 de abril– es discreto en sus celebraciones. El pontífice siempre mantiene su agenda y compromisos aunque se encuentre con algunas sorpresas a lo largo de su jornada.

Con los suyos en Santa Marta

Por ejemplo, en 2019 Francisco estaba participando en la semana de Ejercicios Espirituales con demás miembros de la curia romana en la casa Divino Maestro en Ariccia, al sur de Roma. Una jornada de oración y meditación teniendo la convivencia con los curiales y el silencio como aliados.

Pensando en un número redondo, el 5º, el Papa argentino mantuvo su agenda discreta y celebró en privado el primer lustro de pontificado. Mientras, por todo el mundo se repiten las misas por el Papa ya que el día de su elección es uno de los días propuestos para emplear este formulario.

La misa de la mañana

Por su parte, Francisco este año celebrará la misa de la mañana en Santa Marta y podrá seguirse en todo el mundo. El Papa es parco en menciones a sus acontecimientos personales durante esta liturgia. Por ejemplo, el pasado 13 de diciembre de 2019, Francisco se cumplieron 50 años de su ordenación episcopal y el pontífice lo celebró con una sencilla misa rodeado por los cardenales presentes en Roma en su capilla cotidiana.

Con la situación del coronavirus que está viviendo Italia y las medidas de protección implantadas en el Vaticano, la agenda del 13 de marzo de 2020 de Francisco en Casa Santa Marta presentará su discreción habitual. Cumplir con la petición de “no se olviden de rezar por mí” es el mejor regalo en este séptimo aniversario.