Tras hacerlo la semana pasada los obispos de Italia y siguiendo las medidas impuestas por las autoridades nacionales contra el coronavirus (desde mañana, solo permanecerán abiertas farmacias y tiendas de alimentación), el Episcopado belga también ha decidido suspender todas las misas “desde este fin de semana del 14 de marzo hasta el viernes 3 de abril, como mínimo”.
Así lo anuncian los prelados en un comunicado donde lamentan tener que “suspender todas las celebraciones públicas”. Con una excepción, “los bautizos, bodas y funerales”, que pueden tener lugar “en un círculo restringido”.
Además, aunque no haya eucaristías, “las iglesias permanecerán abiertas para la oración o la meditación personal”. De hecho, los obispos animan a los fieles a refugiarse en la fe, orante y activa, siendo una oportunidad para “vivir esta Cuaresma como un tiempo de oración, conversión, participación fraterna y mayor atención a los demás”.
“Los textos bíblicos habituales de la liturgia –indican los pastores– continuarán inspirando individualmente o en familia nuestra progresión hacia la Pascua”. Para ello, “los sitios web de Cathobel, Kerknet, KTO, RCF, Kerk en Leven, celebraciones en radio-tv, RTBF y VRT, transmisiones en vivo pueden contribuir a esto”.
Finalmente, la Iglesia belga expresa “su gratitud a todos aquellos que están haciendo todo lo posible para detener la propagación de Covid-19 y que rodean con su mejor cuidado a los afectados por la enfermedad”.