El decálogo de recomendaciones de las monjas de Armenteira, desde la clausura, para vivir el “yo me quedo en casa”

Dicen las crónicas que en el siglo XII ya había presencia cisterciense en Armenteira. Reconstruido por el hijo del escritor Valle-Inclán, a mediados del siglo XX, un grupo de monjas procedentes de Navarra lo recuperó para la vida contemplativa. Hoy en día el ‘ora et labora’ , junto a la ruta del agua y la piedra, se percibe en la capilla y en el taller donde se elaboran jabones.

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Un decálogo desde la clausura

En esta situación de confinamiento por el coronavirus, la comunidad reunida en capítulo ha querido proponer a los lectores de Vida Nueva un decálogo de consejos para vivir de forma creyente este tiempo de crisis. Las religiosas que viven cada día rodeadas de los muros del convento, desvelan muchas puertas a las que abrirse en la vida cotidiana desde casa.

1. Puede ser una buena oportunidad para hacer ejercicios espirituales, hay algún sacerdote que los anima y orienta por internet.
2. Reza la liturgia de las horas. Hay aplicaciones gratuitas como ePrex que se descargan y en ellas también se puede encontrar las lecturas de la misa.
3. Rezar el Rosario y guarda un equilibrio entre la oración y la actividad –‘ora et labora’–.
4. Hay muchas posibilidades para hacer manualidades, cocina, ejercicio físico o estiramientos…
5. Ten un rato de lectura espiritual.
6. Entra dentro de ti mismo y ten una mirada amorosa sobre las nuevas oportunidades que te pueden surgir o tu modo de vivir.
7. Valora la familia.
8. Hazte presente a los demás. Hay muchas formas.
9. Quien pueda hacer el bien, que lo haga. Que no espere para ello.
10. Hay en este presente nuevas oportunidades, nuevas actitudes que brotan de nuestro interior. No dejemos que se queden ahí encerradas…