En Colombia la violencia no da tregua, pese al estado de emergencia decretado por el gobierno de Iván Duque ante la alerta por el coronavirus, el pasado jueves 19 de marzo, en el departamento de Putumayo –región amazónica al sur del país– fue asesinado Marco Rivadeneira, presidente la Asociación Campesina de Puerto Asís.
La Red de derechos humanos del Putumayo, Piamonte – Cauca y Cofanía Jardines de Sucumbíos, Ipiales – Nariño ha informado que “aproximadamente a las 2.30 p.m., mientras estaba en una reunión de campesinos en la vereda Nueva Granada, Corredor Puerto Vega – Teteyé, Puerto Asís 3 hombres de civil y armados se acercaron y sacaron del lugar al compañero”. Media hora después fue asesinado. “Esta vez el virus del odio ha cobrado una nueva vida”, han dicho integrantes de la red.
Rivadeneira era un reconocido defensor de derechos humanos y dirigente político, formaba parte del Congreso de los Pueblos y de la junta nacional del Coordinador Nacional Agrario (CNA). Además fue un estrecho colaborador del Foro Social Panamazónico (Focsa). Durante los últimos años dedicó su trabajo en el marco de la sustitución de cultivos de uso ilícito y la exigencia de las garantías para los campesinos.
El presidente de la Comisión de la Verdad, el sacerdote Francisco de Roux, lamentó, en su cuenta de Twitter, lo sucedido: “Con él mataron la esperanza del Putumayo” y agregó que van “más de 400 líderes asesinados en Colombia desde la firma de la paz”.
La Comisión de Derechos Humanos de la ONU en Colombia también ha expresado su enérgica condena: “Nos estremece el homicidio” y aseguraron que venían trabajando con el dirigente desde hace 10 años en la defensa de los derechos humanos en esta región del país.
Otro que se ha sumado a las voces de rechazo es Martín Sjögren, jefe adjunto de la Misión de la Embajada de Suecia en Colombia, que expresó sus condolencias los familiares y al movimiento social de Putumayo. “Hace tres semanas me reuní con el defensor y líder”, ha escrito en un trino.
Foto: Colombia Informa