Una neumonía (no se sabe con certeza si ha sido causada o no por el coronavirus) ha acabado con su vida. Este 23 de febrero, a los 89 años, ha muerto en Brieva (Segovia) Lucía Bosé, a quien muchos jóvenes identifican con su pelo teñido de azul y por ser la madre de Miguel Bosé, Lucía Bosé y Paola Dominguín… Y también, a quienes muchos otros de las generaciones precedentes sitúan por su matrimonio con el torero Luis Miguel Dominguín. Pero todos ellos se quedan cortos, pues estamos ante una actriz que en su Italia natal rodó a las órdenes de Visconti, Antonioni o Fellini, actuando en nuestro país para los dos grandes gigantes de la segunda mitad del siglo XX: Juan Antonio Bardem y Luis Buñuel.
Con todo, Lucía Bosé siempre será recordada por ser una mujer hondamente libre. En 1967, harta de las numerosas infidelidades de su marido (“soy la mujer más cornuda de España”, llegó a declarar al ser de alcance público que el torero era una mujeriego consumado, contándose entre sus amantes ocasionales hasta Ava Gardner), decidió romper amarras y se separó del torero. Y todo en pleno franquismo y con un Dominguín que, compañero de cacerías, era el ojo derecho del mismísimo Francisco Franco.
Tras un par de décadas en todo lo alto como actriz, fundamentalmente en Italia, Lucía Bosé ha pasado el resto de su vida en la España rural, viviendo una vida marcada por el buscado anonimato. Algo así como un “retiro espiritual”, como ella misma bromeaba. Y es que estamos ante una mujer que siempre ha tenido una relación especial con lo trascendente. Apasionada por la pintura (uno de sus grandes amigos fue Pablo Picasso, quien la apoyó tras su separación pese a ser íntimo de Dominguín), se ha dedicado a pintar durante interminables horas una obra marcada preferentemente por la temática religiosa.
De hecho, desde hace muchos años, ha sido legendaria su apuesta por crear en la localidad segoviana de Turégano el primer Museo de Ángeles del mundo. Situado en una antigua fábrica de harina, en él han expuesto cientos de artistas y ha sido visitado por decenas de miles de amantes del arte.
Su hijo, Miguel Bosé, la ha despedido así a través de Twitter: “Queridos amig@s… Os comunico que mi madre, Lucía Bosé, acaba de fallecer. Ya está en el mejor de los sitios”. Sin duda, “el mejor de los sitios” es rodeada de los ángeles que ya entrevió en vida.