Francisco no tiene coronavirus. El Papa ha vuelto a dar negativo en la segunda prueba que se le realiza en poco más de tres semanas. En esta ocasión, se le ha practicado al darse a conocer ayer el positivo de un colaborador cercano de Secretaría de Estado que ha vivido en la residencia de Santa Marta, donde también reside Jorge Mario Bergoglio.
La primera prueba se le realizó el pasado 2 de marzo, pues un largo resfriado hizo saltar las alarmas. Sin embargo, esta “leve indisposición” no fue más que una gripe. Por ello, el Papa continúa celebrando la audiencia de los miércoles, la misa matutina de Santa Marta y el ángelus. Eso sí, siempre a través de una pantalla.
En total, el Estado más pequeño del mundo registra cinco casos positivos desde que la pandemia comenzara a ser estragos en Italia a finales de febrero, un sacerdote llegado de Bérgamo, un empleado, dos trabajadores de los Museos Vaticanos y el reciente colaborador de Secretaría de Estado.
El resto de trabajadores, negativo
El sacerdote infectado está hospitalizado en el Gemelli de Roma desde ayer y se han desinfectado las dependencias de Secretaría de Estado y la casa del Papa, al mismo tiempo que se le ha practicado la prueba a todo el personal, sin registrar ningún positivo, aunque algunos prelados de la Curia están en cuarentena, tal y como informe Ilfattoquotidiano.it.
Entre las medidas de prevención tomadas para proteger la salud del Papa, ya no come en el comedor junto al resto de empleados, como acostumbra a hacer, sino que come en su habitación.
Hace varios días, y como confirmó el portavoz Matteo Brunni, el Vaticano ha impulsado el teletrabajo para evitar que los trabajadores acudan a sus puestos y así propagar el virus.
