El obispo de la Diócesis de Salamanca, Carlos López Hernández, abandonó ayer, 31 de marzo, las instalaciones del Hospital Clínico Universitario, donde se encontraba ingresado desde el pasado día 25 por coronavirus.
Así lo ha anunciado la Diócesis, por medio de un comunicado en el que detalla, además, que en este momento López se encuentra en la Hospedería Fonseca para continuar allí su tratamiento médico y seguir aislado, tras dar positivo en coronavirus en un segundo test.
Oración y cercanía
“Agradecemos las oraciones y las muestras de cercanía hacia nuestro obispo, y pedimos por todos los enfermos y los familiares de los fallecidos, así por los que trabajan de forma incansable en este tiempo de confinamiento”, subraya la Diócesis de Salamanca.
Carlos López no ha sido el único prelado en dar positivo en Covid-19. También el obispo de Palencia, Manuel Herrero y José María Gil Tamayo, obispo de Ávila, se han contagiado con esta enfermedad. Si bien el primero se recupera fuera del centro sanitario desde el pasado 30 de marzo, Gil Tamayo continúa ingresado en el Hospital Nuestra Señora de Sonsoles (Ávila).