La Diócesis de Orihuela-Alicante entregará más de 5.400 mascarillas a los centros penitenciarios de la provincia, tal como ha anunciado en un comunicado. Este material ha sido fabricado con la ayuda de personas voluntarias y donaciones de empresas, centros e instituciones.
El impulsor de esta iniciativa es el Secretariado de Pastoral Penitenciaria, al detectar que las tres cárceles de la zona precisan de este material para hacer frente al contagio del coronavirus entre funcionarios e internos. De momento, ya se ha realizado un primer reparto de 1.980 de ellas entre estos centros y está previsto que, a finales de esta semana, se complete la entrega de al menos otras 3.500.
Nada más conocer las necesidades de estos colectivos sobre los equipos de protección, Pastoral Penitenciaria lanzó la idea de fabricarlos al voluntariado con el que trabaja habitualmente en diferentes localidades de la provincia como Crevillent, Elche, Elda, Monóvar, Villena y Villajoyosa, entre otras. A esta acción se han sumado donaciones por parte de dos cofradías de Monóvar, el Ayuntamiento de Crevillent y varias empresas.
El hecho de que particulares y empresas de la Diócesis se hayan volcado con esta experiencia ha permitido que el material de protección se pueda distribuir tanto entre los funcionarios de prisiones, expuestos al contagio de la enfermedad al entrar y salir de los centros penitenciarios, como a los reclusos, un colectivo de alto riesgo, en buena parte afectado por patologías que le hacen especialmente vulnerable ante el virus y que convive en circunstancias que dificultan el aislamiento.