La Casa de Ejercicios Betania, del arzobispado de Concepción, se ha transformado en el Centro Socio Sanitario Betania. Desde el lunes 30, han empezado a ser trasladados allí enfermos de la red de hospitales de la región del Biobío que no presentan síntomas ni han sido diagnosticados con el Covid-19 y que están en mejores condiciones de salud, aunque deben permanecer hospitalizados. De este modo, será posible liberar 78 camas de hospitales para atención en la emergencia sanitaria provocada por el virus.
La habilitación de este Centro es resultado de una alianza entre el Arzobispado de Concepción, la Intendencia de la Región del Biobío y la Dirección del Servicio de Salud Talcahuano.
El Arzobispo de Concepción, Fernando Chomalí, señaló que “hay muchos chilenos abandonados en los hospitales. Ahora los hemos recibido en Betania con mucho cariño y con alta competencia profesional del Servicio de Salud. Este ha sido un trabajo en conjunto y nuestra misión como iglesia es colaborar porque soy un convencido que una de las fórmulas más importantes para terminar con el coronavirus es la solidaridad”.
Por su parte, el Intendente de la Región del Biobío, Sergio Giacamán García, agradeció al Arzobispado por poner el recinto a disposición de los Servicios de Salud en este momento de necesidad y a la Armada por facilitar contingente para contribuir a su implementación. “Esta es sin duda una ayuda tremenda para estar mejor preparados ante la amenaza del Covid-19, y brindarles un espacio seguro a personas que lo necesitan y que requieren cuidados especiales. A este tipo de acciones nos referimos cuando invitamos a las personas y a las instituciones a cuidarnos entre todos, para superar juntos los efectos de esta pandemia”, dijo.
La implementación del Centro requiere 27 funcionarios del Servicio de Salud que atenderán todos los requerimientos clínicos, de alimentación y de tratamientos a los 78 pacientes, durante las 24 horas en forma permanente.
Este acuerdo responde a la oferta de la Conferencia Episcopal de Chile que puso a disposición del Gobierno sus locales. Similar oferta ha realizado la Conferencia de Religiosas y Religiosos (CONFERRE) al ofrecer 12 edificios pertenecientes a 9 congregaciones religiosas y uno de la misma Conferre.
Para una mejor coordinación se ha resuelto que serán los obispos quienes establecerán la relación con autoridades del gobierno regional y de salud, por tanto, es la Conferencia Episcopal la que recibe los recintos disponibles de la Iglesia y establece con el gobierno su uso.
La arquidiócesis de Santiago, por su parte, ha ofrecido los edificios de sus Vicarías de la Esperanza Joven y para la Educación, además de recintos de 12 parroquias de diversos sectores de la ciudad.
Al dar a conocer esta disponibilidad, el obispo auxiliar Cristián Roncagliolo recordó la reciente exhortación del papa Francisco al comentar la tormenta en la barca en que iban Jesús y sus discípulos. “Nos dimos cuenta, dijo el obispo, de que estábamos en la misma barca, todos frágiles y desorientados; pero, al mismo tiempo, importantes y necesarios, todos llamados a remar juntos, todos necesitados de confortarnos mutuamente. En esta barca, estamos todos. Como esos discípulos, que hablan con una única voz y con angustia dicen: “perecemos”, también nosotros descubrimos que no podemos seguir cada uno por nuestra cuenta, sino sólo juntos”.