Los obispos de la costa pacífica de Colombia, una de las zonas más golpeadas por la pobreza, la violencia y descuido gubernamental, han expresado su profunda preocupación ante “la crítica situación social y sanitaria ante las amenazas de la pandemia del covid 19 en la región”, que “ha sufrido históricamente el abandono estatal y que presenta las mayores carencias a nivel de satisfacción de necesidades básicas, infraestructura hospitalaria y personal de salud”.
Han pedido al gobierno nacional priorizar “un enfoque diferencial étnico y territorial” con “medidas contundentes e inmediatas que sean de conocimiento público en cada una de las subregiones de este territorio sobre prevención y atención” a fin de evitar “una de las peores catástrofes humanitarias que puede dejar esta emergencia”.
Entre las peticiones
Los prelados han señalado que “no es el momento de las divisiones, sino de la unidad. No es la hora de los protagonismos, sino de las alianzas”, por ello invitaron a las autoridades departamentales y municipales a “continuar con el esfuerzo integral de articulación y comunicación para poder afrontar este difícil reto”.
A la población han advertido que de no tomar en serio “las medidas de prevención para contener y mitigar las afectaciones de la pandemia” corren un gran riesgo que “dejará lamentables pérdidas”, porque “constatamos que una gran parte de niños, jóvenes y adultos del territorio no han comprendido la gravedad de la situación”.
Esta pandemia tiene muchos desafíos, por lo cual apelan a la solidaridad de personas, instituciones y empresas de la región y de otros lugares de Colombia en pos de lograr “los apoyos significativos” principalmente en alimentos, medicinas y dotación de hospitales en una región tan golpeada por el empobrecimiento.
Foto: El Tiempo
