A través de Twitter, el secretario general y portavoz de la Conferencia Episcopal Española, Luis Argüello, dirigió ayer, Domingo de Ramos, un sencillo y emotivo mensaje de ánimo ante la crisis desatada por el coronavirus. A los católicos y a la sociedad en general.
“Ante la pandemia –reclamó el obispo auxiliar de Valladolid–, la Iglesia, desde el desconcierto, llama a la esperanza y mira los hechos desde los ojos de Aquel a quien se le conmueven las entrañas. Ve un drama lleno de sufrimiento y generosidad. Se solidariza y agradece”.
Igualmente, la comunidad cristiana “llama la atención sobre las dificultades para acompañar a los moribundos y en el duelo. Solicita medios para el acompañamiento familiar y espiritual. Comprende el desbordamiento del sistema sanitario, pero clama contra el racionamiento discriminatorio”.
“Agradece –asegura– a las familias y a todos. Convoca a la solidaridad con los más vulnerables, también con las naciones empobrecidas: ‘La fraternidad alumbra esperanza, cada gesto cuenta’. Llama a una alianza de toda la sociedad y sus instituciones en favor de un gran proyecto común”.
Finalmente, para Argüello, la Iglesia “ofrece la oración y la Eucaristía por todos. Funda la esperanza en la resurrección del Señor y en su promesa: ‘Yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo’”.