El coronavirus pone en peligro a las casas de migrantes en México

Preocupadas por los daños que pudiera provocar una epidemia de coronavirus Covid-19 en los albergues, casas y centros de atención a migrantes en México, diversas organizaciones diseñaron una serie de talleres en línea (webinars) para intercambiar experiencias y capacitar al personal y a los huéspedes en diferentes ámbitos.

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Las organizaciones involucradas son: Catholic Relief Services (CRS), Cáritas Mexicana –a través de la Dimensión de Movilidad Humana–, Coalición Pro Defensa del Migrante (COALIPRO) y la Diócesis de Tapachula, en el estado de Chiapas.

Los temas que se están impartiendo van desde el manejo de la higiene y saneamiento en espacios cerrados; apoyo psicosocial tanto para las personas migrantes como para los solicitantes de asilo, así como asesoría legal sobre las modificaciones a los trámites, políticas y reglamentos derivados de las respuestas de cada país a la pandemia.

Medidas para proteger a la población migrante

Catholic Relief Services tiene en México una trayectoria de apoyo al trabajo de las casas para migrantes y albergues, a fin de brindar ayuda humanitaria, asesoría legal y atención psicológica a los migrantes durante su tránsito, y para apoyar a los solicitantes de refugio o visas humanitarias durante la espera de la confirmación de sus respectivos trámites.

En entrevista para Vida Nueva, Cecilia Suárez, jefa de Oficina de CRS, y Rolando Wallusche Saúl, asesor Técnico en Agua, Higiene y Saneamiento de CRS, explicaron que, a partir de la declaración de la pandemia del Covid-19, la organización –en coordinación con las otras mencionadas–, llevaron a cabo un mapeo entre las casas de migrantes para conocer las preocupaciones y necesidades para proteger a la población y a los equipos de trabajo en esos espacio.

Fueron 40 las casas que respondieron a una encuesta, y en la mayoría –detallan– la principal preocupación es la posible propagación de la epidemia dentro de las instalaciones, la falta de servicios médicos, el hecho de que no se cuenta con acceso a materiales y equipamiento para mantener la higiene y la salubridad en los espacios, y además se carece de información confiable y accesible en formatos sencillos.

El primer taller en línea, de 40 minutos, se llevó a cabo el pasado 3 de abril en torno a la higiene y saneamiento, por considerarlo un asunto prioritario, pues éste ayudará a tener un manejo preventivo en los albergues, que suelen ser espacios cerrados y con una alta concentración de personas conviviendo, algunas de ellas con problemas de salud o sistemas inmunes débiles, lo cual los pone en un mayor riesgo.

El apoyo que se busca brindar con los talleres estará completamente enfocado a la realidad de los albergues; es decir, considerando que se cuenta con poco presupuesto y se tiene una alta concentración de personas y limitaciones para acceder a equipo y productos de higiene y saneamiento sofisticado.

Un riesgo latente

En relación con el riesgo que tienen los albergues y centros de atención a migrantes, Cecilia Suárez y Rolando Wallusche señalaron: “estos son finalmente lugares de concentración, por lo que el riesgo de propagación o contagio del Covid- 19 podría ser mayor. Por otra parte, tanto el personal de los albergues como las personas voluntarias tienen generalmente constantes desplazamientos, dentro y fuera del lugar”.

Señalaron que esto hace muy difícil aplicar medidas de distanciamiento, como la sana distancia. “También es claro que el exceso de información sin filtro es un riesgo, pues implica reeducar sobre las fuentes más confiables. Lo que se tiene que hacer es minimizar los riesgos. Cuando hay epidemias también tenemos reacciones que pueden generar tensión o violencia entre quienes habitan en un mismo espacio, y algunas de estas reacciones pueden representar una amenaza para quienes son más vulnerables”.

Y respecto a las principales medidas de higiene y saneamiento, sugirieron tomar otras precauciones como intensificar las rutinas de limpieza de los lugares comunes.

“Trabajar en la higiene en general es fundamental: lavarse constantemente las manos y habilitar estaciones de lavado de manos. Se tiene que buscar formas de ampliar los espacios en los lugares de atención a migrantes para reducir los riesgos, y en caso de no poder ampliarse, es alternar el acceso a ciertos servicios como por ejemplo la alimentación, actividades de higiene como el uso de los baños y actividades de recreación. La desinfección de lugares comunes. Se debería de tener mayores cuidados en la preparación de los alimentos restringiendo el acceso a la cocina, por ejemplo, desinfección apropiada de los ingredientes es una medida clave”.

Parte de la información abordada en los webinars puede ser consultada y descargada aquí.