El papa Francisco ha dado a conocer este martes, 14 de abril, el nombramiento del misionero claretiano Josep Maria Abella Batlle, nacido en Lleida en 1949, como obispo de Fukuoka en Japón. Un ministerio pastoral que afrontará tras ser obispo auxiliar desde junio de 2018 de la archidiócesis de Osaka, la tercera ciudad más poblada del archipiélago japonés.
“La vida no deja de darnos sustos. Yo acabo de tener otro hace unos días”, ha señalado tras conocerse su nombramiento, según han informado los Claretians de Catalunya, a cuya provincia religiosa pertenece en origen el claretiano. Desde la congregación señalan el nombramiento como una muestra de la Iglesia en salida que predica el papa Francisco. Abella estará al frente de una diócesis de 7,7 milliones de habitantes con más de 29.000 católicos. El anterior obispo había renunciado ahora hace un año.
Abella fue el superior general de los claretianos de 2003 a 2015, viajó por primera vez a Japón como misionero con 20 años y en 2015, tras dejar el gobierno mundial, regresó al país para convertirse en rector de la catedral de Osaka. En 2018 fue nombrado obispo auxiliar en esa misma diócesis.