La pandemia por el coronavirus, poco a poco, va dejando atrás las situaciones más extremas a medida que las cifras se van estabilizando y dando muestras de que lo peor ya ha pasado. Es el caso de Aleman, donde en algunas regiones se ha superado el confinamiento y se comienza a hablar de vuelta a la normalidad, también en lo que a culto público se refiere.
En este sentido, los obispos alemanes han presentado una serie de medidas para esta desescalada contenidas en el documento “Reflexiones del área de la Conferencia Episcopal Alemana sobre la posibilidad de las asambleas religiosas” que será consensuado con otras confesiones y el ministerio del Interior, según informa Katolische.
Propuestas sobre la mesa
En concreto, tras haber aceptado las restricciones, los obispos piden que la normativa aplicada a las celebraciones sea la misma que el mismo para todas las reuniones y todas las comunidades religiosas. Ahora bien, “la Conferencia Episcopal Alemana rechaza la exclusión temporal de ciertos grupos de personas de la participación en los servicios de la iglesia, por ejemplo, las personas mayores de 60 años”, reclaman.
Y piden a las autoridades que se priorice la habilitación de las celebraciones dominicales en iglesias, hospitales, residencias y comunidades con las respectivas medias de distancia o evitando las multitudes pero sin alejar a los miembros de una familia. Esta normativa pidan que se extienda a los funerales o las misas de diario.
Pensando en fiestas próximas como la Ascensión, Pentecostés o el Corpus Christi, los obispos sugieren que se elaboren protocolos para organizar celebraciones con más gente, pero al aire libre. Además, los obispos animan a que se mantengan las ofertas a través de medios de comunicación y redes sociales y encargan a las diócesis el seguimiento de otras medidas como la administración de la comunión, el uso del agua bendita o el gesto de la paz.
Vuelven las misas
En algunas zonas del país las celebraciones litúrgicas ya van volviendo poco a poco a la normalidad. En Sajonia ya se han permitido misas con un máximo de 15 participantes, es el primer estado que regula cierta vuelta al templo. Esto ya se aplica en Leipzig donde parroquias permiten inscripciones por internet hasta que se cuelga el cartel de “No hay entradas”. En el templo las plazas están marcadas, no hace falta usar mascarillas, hay pocos cantos, no se pasa la cesta de la colecta ni se besa el leccionario tras el Evangelio y la comunión se da con guantes y la patena permanece tapada. En Sajonia, 15 es también el número establecido para las bodas –novios incluidos– y los funerales.
Por su parte, en Berlín se permitirán celebraciones religiosas con hasta 50 personas a partir del 4 de mayo. El requisito es que se observen las regulaciones necesarias de higiene y distancia. Antes, desde hoy ya se permiten reuniones privadas o familiares de hasta 20 participantes, si son necesarias por razones imperiosas, como el acompañamiento de moribundos, funerales, bautizos y bodas. El estado de Brandenburgo ha estado permitiendo ceremonias religiosas, especialmente bautismos y funerales, con hasta 20 participantes desde el lunes.