El presidente de la Comisión de Medios de Comunicación de la Conferencia Episcopal Española ha reivindicado el papel de los profesionales del periodismo durante la pandemia del coronavirus. “No se puede hacer un buen periodismo prescindiendo de la ética y del compromiso por el bien común”, apuntó el también arzobispo castrense, Juan del Río, durante la eucaristía dominical emitida por La 2 de TVE.
En el marco de la 54º Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales, Del Río instó a los comunicadores a perseverar en su tarea en medio de esta crisis. Así admitió que todo ciudadano ha necesitado “que nos dijeran la verdad, que no nos manipularan los datos, que no hubiera baches entre lo que se estaba sufriendo en los hospitales, residencia”.
Durante su homilía, condenó la tentación de caer en un “buenismo” informativo que supone “engañar al ser humano y no edifica a la sociedad”. Así, animó a los profesionales de los medios a construir “una narración que nos diga en medio del desierto de las tinieblas, lo positivo que hay en el ser humano, la capacidad de superación que tiene el hombre, hombres y mujeres del periodismo que nos cuenten historias de esperanza”.
“Necesitamos que los periodistas, comunicadores y escritores, expresen historias desde la libertad, desde la belleza y la bondad”, añadió, sabedor de que “todo periodista, todo comunicador es tejedor de historias que construyan, no que destruyan”.
El arzobispo castrense echó mano del mensaje del Papa para esta jornada, que calificó de “tremendamente profético” para subrayar que la vida “es una historia de amor de Dios a los hombres”.
En el contexto de la Solemnidad de la Ascensión del Señor, el presidente de la Comisión de Medios expresó cómo el cristianismo es “la comunicación de un Dios que se hace noticia y diálogo de amor. Es la historia de las historias que se actualiza en los acontecimientos que estamos viviendo”.
“Dios está presente en las historias de cada enfermo de coronavirus y con tantas familias que se sienten con dolor y melancolía”, subrayó, para enfatizar a continuación: “Cristo está en la pandemia. Dios no nos ha abandonado”.
“¿Va a tener más violencia todo lo que está destruyendo el COVID que la fuerza de la Resurrección? No”, plantó el arzobispo, que hizo un llamamiento a confiar en el Espíritu Santo como aquel que dar a la comunidad cristiana “el ansia de vivir el gozo y la alegría”. Durante la eucaristía, Del Río también tuvo presente a la familia salesiana en la fiesta de María Auxiliadora: “En la hora de las luchas, se Tú nuestro consuelo”.
Ya en el programa previo a la retransmisión de la eucaristía, “Últimas preguntas”, Del Río apuntó que los periodistas “en este momento tienen un papel no solo de regenerar el tejido interior de cada persona, sino una sociedad que siga creciendo en libertad y en verdad, porque, si no, quedamos dominados por una cultura de la mentira”. “Con tal de vender, el fin no justifica los medios”, remarcó. También quiso tener presente las dificultades por la que atraviesan los medios de comunicación desde un punto de vista empresarial y las consecuencias que ello genera en los profesionales: “Recuerdo a algunos periodistas que también han conocido el despido”, se solidarizó Juan del Río.
El presidente de la Comisión Episcopal de Medios reivindicó la renovación que la Iglesia viene realizando en los últimos años en esta materia: “No se ha quedado en el último vagón de la historia, sino que está viviendo un nuevo Pentecostés con lo digital. De golpe y porrazo, hasta el cura más recóndito de España ha tenido que meterse en internet para acompañar a sus fieles”.