El próximo 8 de marzo comienza la subasta benéfica ‘We Run Together’, organizada por Athletica Vaticana, Fiamme Gialle, el Cortile dei Gentili y Fidal-Lazio. Desarrollada en la plataforma Charitystars.com, los beneficios de la misma irán a parar al personal sanitario de los hospitales de Brescia y Bérgamo, quienes en los últimos meses han estado al frente de la lucha contra la pandemia de Covid-19.
De esta manera, y con un objetivo benéfico, se subastarán objetos y experiencias deportivas con campeones olímpicos de múltiples medallas, pero también algunos regalos especiales ofrecidos personalmente para la ocasión por el papa Francisco.
“Esta es una carrera en sentido virtual: se lleva a cabo en una plataforma digital”, dice a Vatican News el cardenal Gianfranco Ravasi, presidente del Pontificio Consejo de la Cultura. “Comenzaremos con un objeto que el Papa, sorprendentemente, ha decidido darnos”, anuncia, haciendo referencia a la bicicleta personalizada con los colores de la Santa Sede y la Argentina que el Papa recibió como obsequio del campeón mundial de ciclismo, Peter Sagan.
“Además, el Papa ha donado otros objetos porque quiere participar en esta carrera, por lo que cada semana se subastará un objeto especial donado por él”, explica. Pero, por otra parte, saldrán a subasta otros regalos ofrecidos por una gran cantidad de atletas que han hecho disponibles sus uniformes o equipamiento. “Incluso existe la posibilidad de hacer un recorrido en uno de los veleros Luna Rossa, actualmente anclado en el puerto de Cagliari”, añade Ravasi.
“Cuando se trata de deportes, es importante volver siempre a su génesis”, dice el cardenal. “Los deportes de hoy a menudo reflejan las degeneraciones de la persona y la sociedad humana: la violencia en los estadios, el racismo, el fenómeno del dopaje o los excesos económicos y la corrupción que dominan especialmente en el mundo del fútbol, que es el deporte más popular”.
Sin embargo, por su naturaleza, “el deporte nació como un acto libre y es, en cierto sentido, similar al arte”. Por ello, en realidad, “el deporte debería ser, en cierto sentido, la expresión casi de la creatividad de la persona y, por lo tanto, un fenómeno cultural básico”.