El cardenal arzobispo de Barcelona y presidente de la Conferencia Episcopal Española, Juan José Omella, ha hecho un llamamiento a “caminar juntos” en medio de la espiral de enfrentamiento político que se vive en el país. Entrevistado en La noche en 24 horas de TVE, ha lamentado la falta de unidad para hacer frente ante la crisis del coronavirus: “Tenemos que hacer un esfuerzo y dejar el debate crispado. Ya tenemos tiempo para analizar. Ahora es tiempo de caminar juntos. Les pido que, en la medida de los posible, superen esos momentos de tensión y se pongan al servicio del bien común, que para eso están los partidos, las administraciones y los gobiernos”.
En este ámbito de las relaciones institucionales, ha agradecido el interés que mostró ayer Felipe VI por la labor de la Iglesia a través de una llamada telefónica y que ha subrayado la “cordialidad” con el Ejecutivo de Pedro Sánchez, tal y como viene subrayando Vida Nueva desde el inicio de esta legislatura.
Por otro lado, la Ley orgánica de protección integral a la infancia y a la adolescencia frente a la violencia, conocida como la ‘Ley Rhodes’, también se ha colado en esta intervención televisiva. Omella ha valorado la medida como “importante” aunque ha recordado la importancia de la familia al declarar que el Gobierno no debe olvidar que los padres “los primeros responsables de la educación de los hijos”.
El cardenal ha destacado el trabajo de la Iglesia para “reaccionar rápidamente” con los abusos a menores. Ahora bien, ha reclamado: “No olvidemos que los padres son los primeros responsables de la educación de los hijos. El Estado tiene que cuidar pero no inmiscuirse demasiado tampoco en el tema de los padres”. “Los abusos son una cosa y luego proteger a los chavales, a ver cómo está la ley… Podemos entrar en un debate jurídico de responsabilidades muy grave. Es un tema muy amplio que necesita reflexión”, reflexionaba.
Valorando algunas cuestiones sociales a partir de la pandemia del coronavirus, Omella ha recordado que Cáritas “ha triplicado las peticiones de ayuda” y ha defendido el trabajo de las residencias de mayores, que “en general trabajan con mucha dignidad y cariño” hacia los ancianos y ha pedido cuidarlos porque “han luchado por la sociedad que tenemos” y merecen “dignidad” y un “cariño especial”. Ahora bien, ha reclamado que “lo que atente contra la dignidad habrá que denunciarlo”.
El prelado también ha confirmado que están en “diálogo” desde la Conferencia con las Administraciones para preparar “en breve” un protocolo sobre la vuelta de las romerías, procesiones u otras ceremonias religiosas al aire libre. “Si puede haber una manifestación o pueden encontrarse en terrazas, ¿por qué no se puede hacer una romería?”, ha reclama Omella, insistiendo siempre en “guardar las distancias” en dichas actividades religiosas y lograr un “criterio común” en todo el territorio.