Los obispos de la región del Quebec (Canadá) han alabado el proyecto de ley presentado en la Asamblea Nacional hace unas semanas que introducirá cambios en el Código Civil de la región para hacer que no prescriban los delitos de agresiones sexuales, violencia infantil y abusos conyugales. De esta manera, la propuesta ofrecida por la ministra de Justicia, Sonia LeBel, permitirá a las víctimas demandar a los presuntos agresores sin que el tiempo pasado desde el delito sea un condicionante.
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Actualmente en la región estos delitos prescriben a los 30 años –hasta 2013 había que hacer la denuncia en los 3 años siguientes a la agresión para que pudiera ser castigada. Los obispos, en un comunicado difundido por los medios vaticanos, aseguran: “Acogemos con beneplácito esta medida legislativa, preocupados por que las víctimas puedan recibir justicia”.
Justicia para las víctimas
Los prelados señalan que “si bien es evidente que la compensación financiera puede contribuir a la expresión de la justicia, es igualmente evidente que la compensación financiera no puede, por sí misma, compensar y aliviar la herida causada por tales actos de violencia”.
En este sentido ratifican su compromiso y deseo para que la Iglesia participe “junto con las víctimas, en las acciones pastorales necesarias para buscar respetuosamente la reconciliación y la reparación”. “En todas las diócesis locales hay un esfuerzo constante para asegurar un ambiente acogedor y seguro para cualquiera que quiera vivir una experiencia de fe e Iglesia”, concluyen.