La vista del papa emérito, Benedicto XVI, a Alemania para visitar a su hermano, Georg Ratzinger, gravemente enfermo, está siendo seguida con interés por los medios alemanes; a pesar de su estricto carácter privado y familiar. El diario sensacionalista –y de gran difusión– ‘Bild’ ha publicado algunas imágenes de la residencia o el traslado del papa emérito en un taxi adaptado para silla de ruedas. Además aventura la hipótesis de que Benedicto XVI ha viajado a Alemania para quedarse y no volver al Vaticano.
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El pasado jueves, 18 de junio, por la mañana Benedicto XVI volaba a Alemania con su secretario personal, George Gänswein, para visitar a su hermano Georg, de 96 años, que está enfermo en Ratisbona. El papa emérito empleó un avión privado que le llevó hasta Münich, donde aterrizó a las 12:30 horas y, desde ahí, se trasladó a la ciudad alemana en un taxi adaptado para personas con movilidad reducida.
Desde el Vaticano aseguran que el pontífice volverá “en unos días” pero el periódico alemán se pregunta si Benedicto XVI ha salido de las “murallas de Pedro” para siempre. La diócesis de Ratisbona, a cuyo clero pertenece el sacerdote enfermo –ciego y postrado en cama según el diario–, niega esta posibilidad. Y es que esta salida del monasterio Mater Ecclesiae en el que reside es inaudita, más allá de las escapadas del papa emérito a Castel Gandolfo y su entorno y una salida en 2013 al hospital Gemelli de Roma.
Difícil privacidad
El comunicado oficial del Vaticano señalaba que Benedicto XVI pasará en Ratisbona “el tiempo necesario”. La fecha de vuelta, según la diócesis alemana, aún no se ha establecido. Además, se señala en el comunicado de la Santa Sede que “junto a él están el secretario, monseñor Georg Gaenswein, el médico, una enfermera, una de las ‘memores domini’ y el subcomandante del Cuerpo de Gendarmería del Estado de la Ciudad del Vaticano”.
Mientras, la Iglesia local ha hecho una llamada a respetar la privacidad de ambos sacerdotes, pidiendo que “este encuentro permanezca privado”. Algo que el popular diario ha rechazado al publicar imágenes del seminario diocesano donde se aloja el papa emérito. Desde el Episcopado no valoran la cuestión: “Estamos contentos de que él, que ha sido miembro de nuestra Conferencia Episcopal durante varios años, haya vuelto a casa, aunque la ocasión sea triste”, ha señalado el presidente de los obispos, Georg Bätzing.
Georg Ratzinger estos años se ha trasladado al Vaticano en torno a la pascua para celebrar el cumpleaños de su hermano. Bild también señala que en 1991, J. Ratzinger no llegó a tiempo para estar cerca de su hermana María Ratzinger en el lecho de muerte, algo que habría influido en el actual viaje.
