“José Gregorio Hernández representa mucho más de lo que nos podemos imaginar y estoy seguro de que, en estos momentos, si hacemos un análisis serio, representa mucho más que la figura de Simón Bolívar. Lo que más nos une es esto”. Este es el primer balance del cardenal Baltazar Porras después de que el Papa Francisco autorizara la beatificación del médico venezolano a través de un decreto hecho público el pasado viernes 19 de junio.
Para el arzobispo de Mérida y administrador apostólico de Caracas, el laico elevado a los altares que murió hace un siglo es un referente para todo el país, que “está presente no solo en los creyentes católicos sino en mucha otra gente de otras confesiones”.
“Tiene ese profundo sentido humanitario, ese profundo sentido de servicio de los unos para con los otros”, expresó el purpurado en una rueda de prensa sobre este sanitario que trabajó en favor de los más desfavorecidos, especialmente en las regiones del interior de Venezuela.Desde ahí, Porras no dudó en afirmar que “representa mucho más que decir ‘tenemos un nuevo santo’, que podría pasar por debajo de la mesa. En cada uno de nosotros hay un pequeño José Gregorio Hernández y lo hemos estado viviendo desde hace muchos años”.
Sobre la fecha en la que tendrá lugar la ceremonia de beatificación, todo apunta a que será “en el primer trimestre del próximo año”, siempre y cuando “las condiciones lo permitan”, señaló el cardenal refiriéndose a la pandemia del coronavirus.
Junto a la rueda de prensa, el cardenal presidió una eucaristía de acción de gracias por la beatificación en la Iglesia Nuestra Señora de La Candelaria. Durante la homilía, Porras recordó que “necesitamos que la luz de la esperanza ilumine nuestros corazones para que la familia venezolana vuelva a unirse”.
“Que los políticos, los empresarios, los comunicadores, los científicos e investigadores, los trabajadores, en fin, todos los sectores, destierren la división, fomenten la libertad de expresión, donde haya separación real de poderes y garantía absoluta de los derechos humanos, procesos electorales transparentes, para que la verdad, la reconciliación y la vida luzcan con mayor resplandor para bien de todos”, reivindicó el administrador apostólico de Caracas.