Ha fallecido en Madrid este sábado 27 de junio, tras una larga enfermedad, la periodista Eva Galvache redactora jefe de los programas religiosos de la Cadena Cope. “Madre de tres hijos, buena compañera, fantástica profesional y amante de su Cartagena natal. Nos ha abandonado la fuerte y sonriente”, señala el comunicado de la emisora en su despedida a la reportera que formó parte del equipo de Religión Cope desde sus inicios junto al periodista Faustino Catalina y a las órdenes del dominico José Luis Gago.
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En el área socio-religiosa de Cope
Tras sus estudios en el CEU, su trayectoria ha estado ligada siempre a la emisora episcopal a la que llegó en 1986. Hasta hace casi 3 años –en los que tuvo que volver a dejar en micrófono por un cáncer– ha participado en programas como El Espejo, Iglesia Noticia y eventos especiales como el operativo de la JMJ de Madrid, la renuncia de Benedicto XVI, la elección del Papa Francisco o la canonización de Juan Pablo II y Juan XXIII. “Nunca se deja de ser periodista. Aunque no trabajes porque la salud te lo impide. Ha sido ver estas fotos y sentir un cosquilleo en el estómago y pensar qué bien lo pasé, cómo disfruté y confirmar que no hay nada como estar en el meollo de la noticia”, escribía el pasado mes de mayo sobre este último acontecimiento que cubrió.
Junto a Catalina, fueron los dos laicos que dieron un impulso de profesionalidad a la recién creada área socio-religiosa de Cope. Y en esta sección ha recibido galardones como el “Premio ¡Bravo!” de Radio de 2013 por la dirección de “Iglesia Noticia”, uno de los programas decanos de la emisora.
José Luis Restán, director Editorial de Cope y presentador de El Espejo, ha recordado en el programa ‘Fin de semana’ los más de “30 años de estar codo a codo con Eva, que era una persona de una alegría y una energía que eran de otro mundo”. “Hay que quedarse con esa entereza y esa transmisión de ese espíritu de cuidar a la familia y a sus hijos”, añadió. Para Faustino Catalina, “Eva era una persona con un positivismo y un apoyo en la fe que impregnaba todo de alegría”.
