“Jesús era del Medio Oriente, no blanco. Es importante que recordemos esto”. Así lo ha expresado en su cuenta de Twitter el arzobispo de Canterbury, Justin Welby, quien ha subrayado además que “el Dios que adoramos en Cristo es universal, y la esperanza que ofrece es una buena noticia para todos nosotros”.
El tweet, que ha acompañado con algunas de sus imágenes favoritas de Cristo elaboradas en todo el mundo y donde se aprecia a Jesús de forma diferente a la representada por la imaginería occidental, cuenta con más de 8.000 ‘me gusta’ y casi 3.000 ‘retweets’.
Esta reivindicación del arzobispo de Canterbury surge en un periodo en el que el racismo y sus implicaciones en la representación artística están a la orden del día. De hecho, el prelado ha declarado a BBC que la Iglesia de Inglaterra revisará “muy cuidadosamente” las estatuas de sus principales lugares de culto para comprobar si realmente esos personajes históricos “deberían estar ahí”.
De esta manera, la Iglesia se une a la iniciativa de Reino unido de revisar los vínculos de las personas representadas en estatuas con el comercio de esclavos, dando respuesta así a las reivindicaciones del Black Lives Matter, surgidas a partir de la muerte del afroamericano George Floyd a manos de la policía.