El pasado año recaudó un total de 43.237.328 €, fondos que provinieron en un 88,1% de fuentes privadas, principalmente de aportaciones de los 72.824 socios y colaboradores de la ONG, y de colectas realizadas en parroquias y entidades religiosas. Así lo revela su Memoria Institucional de 2019, en la que la organización rinde cuentas del trabajo realizado en 2019 en el ámbito de la cooperación al desarrollo y la sensibilización.
- LEE Y DESCARGA: ‘Un plan para resucitar’, la meditación del papa Francisco para Vida Nueva (PDF)
- Regístrate en el boletín gratuito y recibe un avance de los contenidos
Este gran porcentaje de financiación privada “asegura la independencia de la ONG y nos permite dedicar el 90% de los fondos a los fines de sensibilización y cooperación al desarrollo”, señala Ricardo Loy, secretario general de Manos Unidas.
Asimismo, la ONG aprobó el año pasado 540 nuevos proyectos por un valor de 36.132.624,06 € que, junto a los iniciados en años anteriores, superaron los 900 proyectos en marcha en 57 países de África, Asia y América. Estas iniciativas, emprendidas por cerca de 500 organizaciones locales, apoyan de forma directa a 1.556.957 personas en la mejora de sus condiciones de vida, a las que se suman seis millones más apoyadas de manera indirecta.
Trabajando por la igualdad
Del mismo modo, Manos Unidas recuerda que en 2019 celebró su 60 aniversario denunciando con su campaña anual la situación de pobreza y desigualdad que enfrenta un elevado porcentaje de las mujeres de los países del Sur. “Las seis décadas de trabajo en los países más empobrecidos de África, Asia y América nos han dejado una lección muy clara: fomentar la igualdad de derechos entre hombres y mujeres no solo es lo moralmente correcto, sino una de las vías más importantes para impulsar el desarrollo social y la construcción de un mundo más justo y sostenible”, subraya Clara Pardo, presidenta de Manos Unidas.
De hecho, el apoyo a las mujeres es una línea transversal en todas las iniciativas puestas en marcha por la organización, siendo, además, el ámbito de actuación específico en 69 proyectos del área de intervención “derechos de las mujeres y equidad”. Asimismo, los ámbitos más apoyados fueron el de “educación”, con 172 proyectos, y el de “alimentación y medios de vida”, con 103, seguidos del de “salud” (73), “derechos humanos y sociedad civil” (65), “agua y saneamiento” (36) y “medio ambiente y cambio climático” (22).
“Concebimos el desarrollo desde una perspectiva integral” explica Loy, “centrado en la persona y con un enfoque de derechos por el que promovemos no solo el acceso a bienes y servicios, sino la participación activa de todas las personas y agentes implicados”.