Con su acostumbrada Exhortación pastoral, los obispos de Venezuela han cerrado la edición 114 de su Asamblea plenaria, en una inédita modalidad virtual que sorteó los desafíos de un país con fluctuaciones de voltaje e internet. Aprovecharon el momento para expresar su júbilo por la beatificación de José Gregorio Hernández, la cual “interpretamos como un nuevo gesto de amor y misericordia de Dios nuestro Padre” en medio de “estos días difíciles”.
Además han alertado que “la pandemia del COVID-19 se ha ido extendiendo de manera exponencial en los distintos estados, hasta alcanzar, en el momento actual, varios miles de contagios y decenas de personas fallecidas”, lo cual agrava el hambre y el desempleo por causa de la paralización de las actividades en el país poniendo “de manifiesto la crisis ya presente, agravada notablemente por la debilidad del sistema de salud”.
En cuanto al proceso electoral, que ha convocado Nicolás Maduro para el 6 de diciembre de este año, pese a la grave crisis sanitaria en el país, consideran que es un proceso lleno de irregularidades con el cual solo evidencian su afán de “mantenerse en el poder” que su voluntad de propiciar “el bienestar del pueblo”.
Entre las maniobras del régimen se encuentran la convocatoria de unas elecciones parlamentarias “valiéndose de un Tribunal Supremo de Justicia sumiso al Ejecutivo” además de “un Consejo Nacional Electoral ilegítimo y la confiscación de algunos partidos políticos” como también “las amenazas y persecuciones a los dirigentes políticos e intentando comprar conciencias” por lo que “todo esto además de dibujar una ilegitimidad, provocará la abstención y la falta de confianza ante estas inciertas elecciones parlamentarias”.
“Los venezolanos queremos vivir en democracia. Para ello es necesario celebrar elecciones de modo imparcial para todos los partidos políticos y de respeto del voto ciudadano”, han señalado.
Asimismo han calificado de inconstitucional la postura del ministro de defensa, Vladimir Padrino López, en referencia a su negativa de un cambio de gobierno de manera democrática en el país, por lo que “el pueblo sufre” mientras “se van endureciendo lineamientos dictatoriales”.
“Denunciamos como inmoral cualquier maniobra que obstaculice la solución social y política de los verdaderos problemas, así como el cinismo de algunos factores políticos que se prestan a este juego desvergonzado, con el cual el régimen se consolida como un gobierno totalitario, justificando que no puede entregar el poder a alguien que piense distinto”, han manifestado.
De igual modo han advertido que “la oposición es perseguida como nunca antes”, por eso “exigimos una vez más auténticas elecciones libres y democráticas para constituir un nuevo gobierno de cambio e inclusión nacional que nos permita construir el país que todos queremos”.
En un llamado a todos los sectores políticos y sociales del país han exigido que lleguen a un acuerdo nacional: “Hay que concertar para que la ayuda ofrecida por organismos internacionales llegue con el consentimiento y aval de las partes: gobierno, oposición, sociedad civil”.
“Hay ofertas concretas para dotar a un número significativo de hospitales de equipos e insumos necesarios para atender a quien lo necesite. Con esto no se favorece al gobierno ni la oposición claudica”, han exhortado.
Los prelados demandan que la lucha contra el Covid-19 es de todo el país, porque “la calidad de vida, la supervivencia de la gente está por encima de cualquier otra connotación. Esto es prioritario porque nuestra gente se está muriendo y se está desesperanzando cada día más”.
Foto: EFE