Chile: la diócesis de San Felipe tiene nuevo obispo

Con la sola presencia de su hermana Matilde, por la familia, de los vicarios y canciller del Obispado, además de los encargados de la ceremonia litúrgica y de su transmisión, fue consagrado obispo de San Felipe, el sacerdote de la diócesis de Valparaíso, Gonzalo Bravo Álvarez. Los consagrantes fueron el nuncio apostólico en Chile, Alberto Ortega, el arzobispo de Santiago, Celestino Aós, y el administrador apostólico de Valparaíso, Pedro Ossandón.

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Debido a la cuarentena que afecta a la comuna de San Felipe, donde está el templo Catedral de esa diócesis, la ceremonia tuvo lugar en el santuario de Santa Teresa de Jesús, en Auco.

La comunidad diocesana pudo seguir la ceremonia a través de redes sociales e internet. En las dos semanas previas, integrantes de comunidades parroquiales y organismos eclesiales produjeron 12 videos en los que personas representativas de diversos ámbitos de la diócesis daban la bienvenida a su nuevo pastor y preparaban el clima virtual para esta ceremonia.

La ceremonia se realizó en torno a un altar redondo y, en varios momentos, las mujeres tuvieron roles protagónicos, a pedido del mismo Bravo. Además, en forma inédita, dos mujeres integrantes de comunidades firmaron el acta de toma de posesión del nuevo obispo.

Espacios sanos y seguros

Al término de la eucaristía, en la cripta del Santuario, el nuevo obispo envió su saludo a las comunidades de la diócesis y sus agentes de pastoral. En parte dijo: “Cada persona cristiana está llamada a colaborar para hacer de nuestras comunidades espacios sanos y seguros. Seré el primero en colocarme a la escucha y al trabajo de reparación de sus víctimas, cueste lo que cueste. Porque en estos tiempos, debemos ser claros y no titubeantes. Es por eso, que anuncio aquí la creación de una Comisión Diocesana de Transparencia, cuya misión será ordenar, organizar y establecer las directrices pertinentes en los ámbitos administrativos, económicos y lo concerniente a abusos de carácter sexual, de conciencia y de poder”.

Agregó que se incorpora a esta diócesis “para acompañar procesos que nos permitan crecer juntos en una comunión fraterna y en reconocernos pecadores; y, al mismo tiempo, sabernos misioneros de un Cristo vivo que nos llama a la conversión, sin temores. Sacerdotes, diáconos, religiosas y religiosos, laicos y laicas, movimientos y espiritualidades específicas, formamos el pueblo de Dios, quienes unidos en la diversidad de carismas nos sentimos parte del Cuerpo de Cristo, que es la iglesia”, dijo el nuevo obispo.

Según la web kairosnews.cl, las estadísticas de redes sociales indican que la ceremonia fue captada por más de 13 mil dispositivos en red lo que habría generado un impacto superior a 31 mil personas. Interactuaron 3.108 personas y más de 2.500 dejaron consignados sus comentarios de bienvenida al obispo y de felicitaciones al obispado por la transmisión.