“La política es una de las formas más altas de la caridad, porque ella busca el bien común y la justicia social”, afirma el Comité Permanente del Episcopado chileno en la presentación a su llamado a una participación activa en el proceso constituyente que se inicia con el plebiscito del próximo 25 de octubre.
- LEE Y DESCARGA: ‘Un plan para resucitar’, la meditación del papa Francisco para Vida Nueva (PDF)
- Regístrate en el boletín gratuito y recibe un avance de los contenidos
“La Iglesia nos enseña que participar en las instancias de la sociedad civil, entre ellas los actos electorales propios de la democracia, es una forma de hacer presentes los valores del Evangelio”, agregan. Para ello ofrecen un material, con el título de “Participación ciudadana, un compromiso con la justicia y la paz”, que consta de dos fichas: “Preparándonos para el Plebiscito 2020” y “Constitución, Plebiscito y Democracia”, en formato digital, para ser usadas en las familias y las comunidades o grupos que puedan reunirse.
Acuerdo para superar la crisis
Este plebiscito fue convocado como respuesta al llamado ‘estallido social’, que se inició el 18 de octubre, con una manifestación callejera que, en Santiago, reunió más de un millón de personas, y otra cifra casi igual en muchas ciudades de regiones. Su repetición en las semanas siguientes se vio afectada por graves incidentes de violencia que motivaron una reunión transversal de dirigentes de 10 partidos políticos que, en la noche del 15 de noviembre, tras más de 15 horas de conversaciones firmaron el “Acuerdo por la paz social y nueva Constitución” que propone un itinerario para superar esa crisis.
Los obispos, en la presentación de este llamado, aluden a ese hito: “En un momento de gran tensión en el país, un amplio espectro político llegó a un acuerdo en el mes de noviembre de 2019. Dicho acuerdo buscaba recuperar la paz social, lo que ha sido muy difícil de lograr. Los efectos sociales de la pandemia, la situación en la Araucanía y otros conflictos han complejizado el ambiente. Pero ningún esfuerzo es vano para este propósito, como lo demuestra la gigantesca red solidaria que en todo el país ha ayudado a quienes más han sufrido necesidad en este tiempo”.
“Porque amamos a Chile, dicen los obispos, nos interesa que nuestra patria, hogar de todos, progrese en justicia y paz, en igualdad de oportunidades y en mejores condiciones para las personas y grupos más vulnerables. Eso no se logra por la vía de la violencia ni por la imposición arbitraria de un sector sobre otro. Lo mejor de Chile lo hemos tejido a través del diálogo, la amistad cívica y la búsqueda de grandes acuerdos con generosidad de espíritu y altura de miras”.
Participación activa
Con ese espíritu, hacen este llamado y ofrecen este material. “Ahora es el tiempo de definir a través del sufragio una decisión respecto de la constitución política. Esa decisión es la que tomaremos finalmente el próximo 25 de octubre, con los debidos resguardos sanitarios”, expresan.
A continuación, llaman a la participación activa: “no le corresponde a la Iglesia dirigir ni orientar un voto, ni mucho menos tomar partido por una opción. Sí nos corresponde promover la participación activa concurriendo a votar. También es nuestra misión ayudar a que la ciudadanía conozca debidamente las legítimas opciones que se presentan. Así, informada y libremente, en conciencia, cada persona podrá formarse una convicción que oriente su voto personal”.
“Esta motivación inspira estas dos fichas que presentamos, señalan los obispos. Queremos que sean conocidas y compartidas a través de las redes sociales digitales. Que ayuden al diálogo en familia y en aquellas comunidades que puedan reunirse presencialmente o a distancia. Que animen nuestra participación activa. Y, por sobre todo, que sean un estímulo para revitalizar nuestra esperanza, alejar el miedo, el egoísmo y el antagonismo, para atraer el diálogo, los encuentros, el respeto mutuo y la confianza”, finaliza la presentación del Comité Permanente en la página web donde ofrecen las dos fichas para la participación ciudadana.
Lo que está en juego
En el plebiscito nacional convocado para el 25 de octubre, se recibirán dos papeletas de votación: una con la pregunta ¿quiere usted una nueva Constitución?, seguida con las alternativas “Apruebo” y “Rechazo”, y una segunda cédula electoral con la pregunta: ¿qué tipo de órgano debiera redactar la Nueva Constitución?, acompañada de las respuestas: “Convención Mixta Constitucional” y “Convención Constitucional”.
Si se aprueba elaborar una nueva Constitución el organismo que defina este plebiscito será el encargado de hacerlo, proceso que concluirá, después de algunos meses de trabajo, con un nuevo plebiscito nacional, de participación obligatoria, para ratificar el texto de la Constitución que se proponga.