REPAM Bolivia exhorta al Gobierno a asumir responsabilidades por las secuelas a un año de los incendios de la Amazonía

Eugenio Coter, obispo de Pando y presidente de la Red Eclesial Panamazónica (REPAM) capítulo de Bolivia, ha pedido en un comunicado al Gobierno asumir las responsabilidades por las secuelas que dejaron los incendios en la Chiquitanía, el Chaco, el Oriente y la Amazonia de la Amazonía en 2019.

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Todo tras el fallo del Tribunal Internacional de los Derechos de la Naturaleza (TIDN), que calificó los desastres como “un ecocidio provocado por autoridades bolivianas y el agronegocio”.

Llamado a las autoridades

El obispo ha asegurado que el pronunciamiento del tribunal “reconoce en la legislación boliviana y en las actuaciones de distintos estamentos del país un desempeño destructivo de la vida y del medio ambiente”, por lo que pide a los poderes públicos como a organismos económicos y sociales tomar acciones concretas en favor de la Amazonía y sus poblaciones afectadas.

“Quedaron en un silencio cómplice e inoperante frente a reclamos que, en su momento, fueron pertinentes y que necesitaban de la acción judicial”, ha denunciado.

Desde la REPAM Bolivia celebran esta sentencia y piden “a las distintas instancias que asuman el dictamen del Tribunal Internacional de los Derechos de la Naturaleza y se empoderen para la aplicación del mismo”.

Votar con conciencia

Para el prelado “aceptar responsabilidades requiere asumir un compromiso para corregir los errores”, por tanto “esto nos llama al desafío de buscar nuevos caminos en que las legítimas aspiraciones de desarrollo vayan en armonía con la naturaleza”.

Ha invitado a la ciudadanía a votar con conciencia para los comicios presidenciales el próximo 18 de octubre y demanden de los programas de cada candidato “un enfoque en la protección del medio ambiente, agro economía y desarrollo rural, en especial de la Amazonía”.

“Es el fuerte grito de la Amazonía y de las demás regiones del territorio nacional, donde el peligro está ligado a un destino común: persona y naturaleza están amenazados por el mismo exterminio. ¡No es verdad que la única opción para la economía y la producción de alimentos sea terminando con los bosques y la vida silvestre!”, concluyó.

Foto: REPAM Bolivia