“A veces en el mundo de la escuela o en las catequesis insistimos en los valores y está muy bien, porque son ideas, actitudes que es necesario cultivar, pero este es un año importante para cultivar virtudes, lo que tiene que ver con la fuerza del corazón. En todos los ámbitos debemos ver esta situación como una oportunidad de colaboración”. Así se ha presentado ese mediodía Luis Argüello, secretario general de la Conferencia Episcopal Española en los micrófonos de ‘El Espejo’ (COPE).
- LEE Y DESCARGA: ‘Un plan para resucitar’, la meditación del papa Francisco para Vida Nueva (PDF)
- Regístrate en el boletín gratuito y recibe un avance de los contenidos
Preguntado por las dificultades que entrañará el nuevo curso escolar y los posibles brotes que se produzcan en el interior de las aulas, Argüello tiene claro que la prioridad educativa este año es sacar el curso adelante, dejando en un segundo plano la nueva ley: “Ya comentamos al Ministerio en una reunión que lo prioritario era organizar el curso más que la ley, siendo necesario un pacto escolar. Hemos mostrado nuestra disposición a colaborar sabiendo que no es sencillo, porque las propias exigencias higiénicas que vemos que son necesarios en las aulas, las necesidades de las parroquias y los locales parroquiales son lo que son, pero en alguna escuela concreta, en relación con alguna parroquia concreta, esta colaboración pueda darse”.
Remar en conjunto
Ante la situación de crisis económica que trae consigo la pandemia, el prelado ha invitado a todos los cristianos a remar en dos direcciones: “La que se realiza en nuestros propios ámbitos eclesiales y el llamamiento que la comunidad cristiana está llamada a realizar, a concretar la fraternidad y la caridad. Pero está también la dimensión ciudadana y el llamamiento a las administraciones públicas para sentarse y buscar la mejor manera para que el plan de reconstrucción sea llevado adelante sabiendo que todos debemos colaborar. Es una ocasión en el que no podemos mirar para otro lado y no asumir la responsabilidad, cada uno desde su ámbito”.
El también obispo auxiliar de Valladolid ha hablado sobre las residencias de mayores, que será uno de los ejes principales de acción de la Iglesia en este nuevo curso. “Nos sentimos urgidos a poner de nuestra parte lo que sea necesario para que el cuidado social en general, y de los mayores en particular, sea tenido en cuenta y cultivado de manera especial en este tiempo. La Iglesia tiene una presencia grande en el campo de las residencias de mayores, de ahí este llamamiento, principalmente en aquellas residencias que están en manos de instituciones eclesiales para poner todo de nuestra parte para que ese cuidado se realice”, ha indicado.
Sobre las restricciones y accesos a los templos, el portavoz de los obispos ha remarcado que el desafío ahora, una vez que en lo que se refiere al culto la situación está encauzada, es “organizar los grupos de formación o de catequesis y las vías para ayudar a los demás”.
Sobre las inmatriculaciones
Por otra parte, Argüello ha señalado que la CEE y el Gobierno retomarán en septiembre las conversaciones sobre el IBI y las inmatriculaciones de la Iglesia. De hecho, ha aclarado que ya se ha producido un encuentro entre técnicos del ministerio de Presidencia y los de la CEE, que permitirá que durante el próximo mes se vayan abordando “todas estas cuestiones que han surgido repetidamente” junto a estos expertos.
“En el periodo previsto para inmatricular bienes, hemos seguido las pautas pero deseamos que todo se clarifique. En el IBI, estamos sometidos a una legislación que no es especifica de la Iglesia, tiene que ver con toas las organizaciones no lucrativas”, ha explicado el portavoz de la CEE. Por este motivo, esta cuestión ha de regularse no solo para la Iglesia Católica.
