A las 12 del sábado 12 fue consagrado obispo el mercedario Ricardo Morales Galindo, en el templo catedral de Copiapó, diócesis que asume como pastor. Debido a las limitaciones sanitarias sólo participaron el arzobispo de Santiago, Celestino Aós, anterior obispo de Copiapó, quien presidió la eucaristía; el Nuncio Apostólico, Alberto Ortega; Alberto Lorenzelli, obispo auxiliar de Santiago; y dos sacerdotes de su orden religiosa.
Al inicio de la celebración Morales bajó a la cripta del templo donde visitó la tumba de Fernando Ariztía, recordado obispo de esa diócesis por 24 años.
La consagración fue transmitida por televisión del obispado de Copiapó y otros medios digitales, con comentarios del sacerdote Alex Vigueras. Al término de la Misa, el nuevo obispo dijo: “Me ha tocado acompañar, consolar y llorar con víctimas de abusos eclesiásticos, hombres y mujeres, que con su dolor me han desgajado el corazón. Por ustedes, hermanos sobrevivientes, he dicho si al Papa”.
Llamó a poner siempre a Cristo en el centro, donde la mayor dignidad sea el servicio “los pequeños, los pobres, marginados, discriminados, los ninguneados de nuestro mundo”. Recordando el Concilio Vaticano II, pidió “aprender a escuchar el corazón de nuestro pueblo, y en el mismo acto, escuchar el corazón de Dios”, e invitó a cuidar los “brotes de esperanza, secar nuestras lágrimas por tanto dolor y vergüenza, y reconocer que el Señor nos invita a todos a caminar juntos, a hacer vida la sinodalidad, convirtiéndonos en un hospital de campaña para los que se sienten excluidos”.
Será el sexto obispo de la diócesis. Nació en San Fernando, a 140 kilómetros al sur de Santiago, en septiembre de 1972. Es abogado y magister en derecho de Infancia, adolescencia y familia. En 1997 ingresó a la Orden de la Merced donde profesó sus primeros votos en 1999 y su Profesión perpetua en el 2005. Al año siguiente fue ordenado sacerdote. Fue superior provincial de la Orden de la Merced en Chile y estando en ese cargo, en el 2018, fue nombrado por el papa Francisco administrador apostólico de la Arquidiócesis de Puerto Montt, cargo que desempeñó hasta febrero de 2020. El 20 de junio de 2020, el Papa lo nombró obispo de Copiapó.