‘Desde fuera; repensando la doctrina de la Iglesia’ es el título del libro que el sacerdote redentorista irlandés Tony Flannery publicará el próximo mes. Toda una declaración de intenciones que muestra su rechazo a seguir las recomendaciones que se le han hecho desde la Congregación para la Doctrina de la Fe. Apartado de su ministerio público desde 2012, recibió el dictamen del organismo vaticano el pasado mes de junio. En él se le pide que se retracte en algunas posiciones doctrinales como la ordenación de mujeres.
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Una retractación formal
Cuando se le comunicó la medida preventiva hace 8 años, el encargado de transmitírsela fue el superior general de los Redentoristas, Michael Brehl, con la oposición del provincial de la congregación en Irlanda. Hace un años, Doctrina de la Fe retomó la cuestión a través de una carta firmada por su secretario, Giacomo Morandi, pedía que Flannery se retractara por escrito de sus posturas “sobre la homosexualidad, las uniones civiles entre personas del mismo sexo, y la admisión de las mujeres al sacerdocio”, así como de algunas afirmaciones sobre la ideología de género, según recogió The Tablet.
Esta retractación sería, explica Morandi, la puerta de acceso a una “readmisión gradual” al ejercicio del sacerdocio. “Además, dado que ha afirmado en numerosas ocasiones que no es teólogo, se le debe pedir que no hable públicamente sobre los temas mencionados que han causado problemas en el pasado”, añadía además el secretario.
El texto presentado a Flannery, uno de los fundadores de la Asociación de Sacerdotes Católicos, era una declaración genérica: “Yo, P. Tony Flannery C.Ss.R., me someto a todas las proposiciones doctrinales mencionadas anteriormente dadas por la Congregación para la Doctrina de la Fe en lo que se refiere a la enseñanza de la Iglesia sobre el: 1. Reserva del sagrado sacerdocio sólo para los hombres; 2. La licitud moral de las prácticas homosexuales; 3. El reconocimiento legal del matrimonio entre personas del mismo sexo; y 4. La Teoría del género”, según ha publicado The Irish Times.
“No podría vivir conmigo mismo”
“Para mí firmar un documento que sostengo que las mujeres nunca pueden ser ordenadas sacerdotes en la iglesia católica sería una total mentira. No podría vivir conmigo mismo si firmara ese documento”, ha señalado al medio inglés el propio Flannery, quien tilda el procedimiento como algo del “siglo XIX”. “Hay obispos, los obispos alemanes por ejemplo, muchos de los cuales se han pronunciado a favor de la ordenación de mujeres. Es una cuestión muy abierta en la iglesia ahora”, añade el acusado.
A sus 73 años, Flannery no se resigna a mantener silencio. “Decepcionado y entristecido” por los acontecimiento, acusa a Doctrina de la Fe de no tener “la decencia de tratarme como un ser humano y que se comunicaran directamente conmigo y me dieran la oportunidad de exponer mi situación”. “Veo esto como el final del camino para mí y para el ministerio. Para lo que queda de mi vida, no hay posibilidad de ninguna forma de ministerio sacerdotal oficial y tengo que vivir con eso”, lamenta apelando al mensaje de misericordia y apertura del papa Francisco. En este sentido acusa a Brehl de haber seguido las indicaciones de la congregación romana.
