7 claves para celebrar un Domund marcado por la pandemia del coronavirus

Llega el día del Domund, la jornada en la que, de un modo especial, la Iglesia reza por los misioneros y colabora con las misiones. Una iniciativa que se celebra desde hace casi un siglo en todo el mundo el penúltimo domingo de octubre, el “mes de las misiones”. Vida Nueva, repasa las claves de este domingo misionero que en este 2020 marcado por la pandemia del coronavirus necesita, más que nunca la solidaridad de los fieles.

• DOCUMENTO: Texto íntegro de la encíclica ‘Fratelli Tutti’ del papa Francisco (PDF)
• LEE Y DESCARGA: ‘Un plan para resucitar’, la meditación del papa Francisco para Vida Nueva (PDF)
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1. El lema

“Aquí estoy, envíame” es el lema de la jornada de este 2020. La cita está entresacada del relato de la vocación del profeta Isaías (cf. Is 6,1-13). Un texto que recoge la experiencia de toda una vida y presenta el retrato completo de la misión de una persona.

“La misión tiene, desde su origen, la dinámica del envío. El Padre envía al Hijo y al Espíritu Santo; Jesús envía a sus discípulos a anunciar el Evangelio a todas las gentes. Toda la historia de la Iglesia se ha tejido con envíos de misioneros que, desde sus comunidades de origen, han salido a anunciar a Cristo con obras y palabras, formando nuevas comunidades”, destacan los organizadores.

2. El vídeo

La misión se concreta en el trabajo de los misioneros y misioneras por todo el mundo. La campana se centra en las historias de Antonio, Alfonso, Juan Pablo y María, Pablo y Rosario. Son los protagonistas del vídeo de este año y que sirven para presentar los respectivos proyectos en los que trabajan en diferentes partes del mundo.

Fueron enviados a diócesis que dependen para su sostenimiento de las aportaciones del Domund. Estas ayudas permiten su subsistencia y que en ellas puedan trabajar los misioneros. Los enviados a los Territorios de Misión cuentan con quienes participan cada año en el Domund con su tiempo, su donativo y su oración”, se explica en el vídeo.

3. El mensaje

El papa Francisco publicó su mensaje para la jornada de este 2020 el pasado 31 de mayo, solemnidad de Pentecostés. El pontífice recalca que “en este año, marcado por los sufrimientos y desafíos causados por la pandemia del COVID-19, este camino misionero de toda la Iglesia continúa”. Para el Papa “la misión que Dios nos confía a cada uno nos hace pasar del yo temeroso y encerrado al yo reencontrado y renovado por el don de sí mismo”.

“La misión, la ‘Iglesia en salida’ no es un programa, una intención que se logra mediante un esfuerzo de voluntad. Es Cristo quien saca a la Iglesia de sí misma. En la misión de anunciar el Evangelio, te mueves porque el Espíritu te empuja y te trae”, recuerda Francisco. “La Iglesia, sacramento universal del amor de Dios para el mundo, continúa la misión de Jesús en la historia y nos envía por doquier para que, a través de nuestro testimonio de fe y el anuncio del Evangelio, Dios siga manifestando su amor y pueda tocar y transformar corazones, mentes, cuerpos, sociedades y culturas, en todo lugar y tiempo”, añade.

Y es que, para el Papa, “comprender lo que Dios nos está diciendo en estos tiempos de pandemia también se convierte en un desafío para la misión de la Iglesia. La enfermedad, el sufrimiento, el miedo, el aislamiento nos interpelan. Nos cuestiona la pobreza de los que mueren solos, de los desahuciados, de los que pierden sus empleos y salarios, de los que no tienen hogar ni comida”. Por eso el Domund “también significa reafirmar cómo la oración, la reflexión y la ayuda material de sus ofrendas son oportunidades para participar activamente en la misión de Jesús en su Iglesia”.

4. La carrera virtual

Ante las dificultades de la pandemia para una colecta por las calles o con las parroquias a pleno aforo, Obras Misionales Pontificias (OMP) ha propuesto la‘1ª Carrera Solidaria Virtual Domund 2020’. A través de la web, puedes conseguir un dorsal desde tu propia casa y elegir una misión en la que participar como equipo: Angola, Camerún, Japón, Perú, Tanzania o Vanuatu en Oceanía. Precisamente los proyecto que aparecen en el vídeo.

En función de la distancias que cada uno elija correr o caminar durante unos días puede hacer un donativo y recibirá un dorsal de participación. “Hacer deporte por una causa solidaria nunca fue tan fácil” señalan los organizadores.

5. Los datos

Según OMP, España es uno de los países que más misioneros tiene, unos 10.893 misioneros según su base de datos. Están en 135 países, siendo Perú el país con mayor número de españoles, 727 misioneros.

En el mundo hay 1.115 territorios considerados de misión, un tercio de la diócesis del mundo y con casi la mitad de la población mundial. Mantienen 26.898 instituciones sociales (hospitales, orfanatos, residencias de ancianos…). Según los organizadores, “en los últimos 30 años, la Iglesia ha abierto de media 2 instituciones sociales y 6 instituciones educativas al día en las misiones”.

6. La colecta

Con lo recaudado en esta jornada se forma un Fondo Universal de Solidaridad, a modo de una gran hucha internacional del Domund, que se pone a disposición de la Santa Sede. En 2020 fueron 77.776.132,07 euros en todo el mundo. Este dinero se divide de forma equitativa entre los 1.115 considerados territorios de misión.

La colaboración de los fieles en España es destacada. Es, después de Estados Unidos, el segundo país del mundo que más colabora con el Domund. Según datos de la organización, ambos países aportan más de la mitad del Fondo (13,5%y 38,7% respectivamente). En 2019, las Iglesias de España enviaron a Roma un total de 10.527.782,81€. Con esta cantidad se han financiado 439 proyectos en 149 territorios en 39 países.

7. La oración

Señor, me da miedo lo desconocido,
me veo insignificante y débil,
pero me fío de Ti, que me amas
y has querido contar conmigo
para llegar al corazón de otros.
Aquí estoy, envíame.

Tú me muestras la Iglesia entera,
mucho más allá de lo que alcanzo a ver.
Señor, quiero ayudar
a que tu Evangelio siga sanando la dignidad herida
de tantas personas en el mundo.
Aquí estoy, envíame.

Tú puedes hacer de mí
un cristal que te transparente
ante quienes no te conocen,
ante quienes sufren la injusticia,
el dolor, la enfermedad, la pobreza,
el hambre de pan, el hambre de Vida.
Aquí estoy, envíame.

Amén.