“La solución ‘dos pueblos, dos Estados’ parece ser la única ‘no solución’ posible, porque a los palestinos no se les puede decir que no tienen derecho a una tierra ni a una nación. Tienen derecho a ello”. Así lo ha afirmaba Pierbattista Pizzaballa, administrador apostólico de Tierra Santa, en la conferencia ‘Tierra Santa y Oriente Medio. Actualidad y posibles perspectivas’, recogida por SIR y que se celebró ayer, 21 de octubre, en la sede de la Orden Ecuestre del Santo Sepulcro, en el marco de las celebraciones de la fiesta de Nuestra Señora de Palestina, el 25 de octubre.
“En este momento es muy difícil lograrlo porque no hay diálogo entre las dos partes”, explicó Pizzaballa. “Desde hace años, israelíes y palestinos ya no se hablan, no hay confianza mutua. La propia comunidad internacional ya no está presente, salvo el apoyo económico a la Autoridad Palestina”, añadió.
Por ello, la solución de crear dos estados –tal como defiende la Santa Sede– “sería la única posible pero hoy, pero técnicamente no lo es”. Para Pizzaballa el muro que divide ambos pueblos “es el signo más evidente” y, de hecho, lo más necesario es que “se reconstruya la confianza mutua en el territorio”.
“Necesitamos una visión y liderazgo ahora ausentes en ambos lados”, subrayó. Por otra parte, al ser cuestionado sobre si la posible elección del católico Joe Biden como presidente de Estados Unidos podría cambiar la situación de la cuestión israelo-palestina y, en general, de Oriente Medio, ante lo que Pizzaballa respondió confirmando el “fuerte impacto que siempre han tenido” las elecciones estadounidenses en “israelíes y palestinos”.
“Ahora mismo existe una gran armonía entre la administración Trump y el Gobierno de Israel”, aseveró. “Un cambio político sin duda tendría repercusiones, pero creo que también es difícil para los palestinos reconstruir su confianza en la administración estadounidense”, matizó.