¿Ha cambiado la doctrina de la Iglesia en lo que uniones entre homosexuales se refiere? Esta es la pregunta que ha flotado sobre le ambiente de la conferencia internacional ‘El papa Francisco y las uniones civiles homosexuales ¿cambió la doctrina?’ organizada por la Academia de Líderes Católicos y respaldada por Vida Nueva este viernes, 23 de octubre. La pregunta surge tras el amplio recorrido que ha tenido una intervención del pontífice recogida en el documental ‘Francesco’, dirigido por el ruso Evgeny Afineevsky, que se estrenó esta semana en el Festival de Cine de Roma.
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Las palabras del Papa
“Las personas homosexuales tienen derecho a estar en la familia, son hijos de Dios, tienen derecho a una familia. No se puede echar de la familia a nadie, ni hacer la vida imposible por eso. Lo que tenemos que hacer es una ley de convivencia civil. Tienen derecho a estar cubiertos legalmente”, es la cita completa que se oye en español de boca del propio pontífice. Una selección de citas en el contexto de una entrevista más amplia a la cadena mexicana Televisa, documentos completos se expusieron en el encuentro.
A estas palabras de Francisco sobre la aprobación de leyes que reconozcan las uniones civiles para parejas homosexuales se han enfrentado públicamente Rogelio Cabrera, presidente de la Conferencia Episcopal Mexicana y arzobispo de Monterrey; Javier del Río, arzobispo de Arequipa (Perú); Marta Rodríguez, antigua jefa de la Sección Mujer del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida y actual integrante del Comité de Redacción del suplemento femenino de ‘L’Osservatore Romano’ –Donne Chiesa Mondo, editado en español solo por Vida Nueva–; y Rocco Buttiglione, político italiano y excolaborador de san Juan Pablo II.
El colaborador de Bergoglio
El encuentro se ha iniciado con un texto de Víctor Fernández, arzobispo de la Plata (Argentina), quien ha destacado que para el Papa “la expresión matrimonio tiene un sentido preciso” y destaca que “de hecho existen uniones muy estrechas entre personas del mismo sexo, que no implican de por sí relaciones sexuales, pero sí una alianza muy intensa y estable. Se conocen a fondo, comparten el mismo techo durante muchos años, se cuidan, se sacrifican el uno por el otro”, señala refiriéndose a Bergoglio.
“Puede ocurrir que ellos prefieran que en un caso extremo o de enfermedad no se consulte a sus parientes, sino a esa persona que conoce a fondo sus intenciones. Y por lo mismo prefieren que sea esa persona quien herede todos sus bienes, etc. Esto puede estar contemplado en la ley y se llama ‘unión civil’, o ‘ley de convivencia civil’, no matrimonio”, apunta el que fuera colaborador de su época de arzobispo de Buenos Aires.
Matrimonio y acompañamiento
Rogelio Cabrera destacó que “la palabra y actitud del Papa siempre ha sido muy transparente” siendo un gran transmisor del “aroma del evangelio”. El prelado ha pedido ver “los contextos existenciales y teológicos” con los que discernir las palabras de Francisco que “es siempre fiel al Espíritu que lo acompaña”. “El Papa habla al que sufre”, reiteró Cabrera recurriendo al evangelio y los escritos principales del pontífice. “Me siento en plena consonancia pastoral con lo que el Papa ha dicho”, sentenció aludiendo al fenómeno de viralidad que han tenido estas declaraciones.
Para el prelado, Francisco dejado clara la fuerza “del matrimonio y la familia” a ejemplo de la familia de Nazaret. En ‘Amoris laetitia’ queda delineada “la grandeza del sacramente del matrimonio” sin dejar de lado la llamada al acompañamiento desde “la misericordia”. También ha destacado el deseo de Francisco de ser “hermano de todos” con un “amor incondicional”. Para el obispo, esta narrativa evangélica es la que ilumina la norma para los creyentes, “la ley viene después”, añadió señalando la pedagogía bíblica de Dios.
Rogelio Cabrera ha presentado tres imágenes del Papa para comprender una realidad complejo: la de sueño –con “la esperanza de una humanidad más fraterna en la que todos encuentren su lugar en el mundo”–, poliedro –como “llamada a cuidar a todos” especialmente los que se quedan atrás– y las periferias –destacando la opción misionera de “ir a donde nadie va, a dónde nadie se acerca”–.
“Claridad doctrinal y realismo pastoral”
Javier del Río comentó las características y el contexto de las palabras del papa Francisco en el nuevo documental, que ocupan una pequeña parte del metraje. Para el prelado estamos ante “una opinión, una orientación pastoral del Papa con ese modo de hablar coloquial y cercano”. “No es ni más ni menos que eso”, destaca del Río. “Claridad doctrinal y realismo pastoral” es, para el obispo, un principio por los que se rige el Papa junto al de “iniciar procesos” de acoger, acompañar, discernir e integrar.
“La acogida, para ser real, debe ir acompañada desde la misericordia”, ha reafirmado el prelado. Por ello, ha destacado la “dimensión samaritana de la Iglesia y la construcción de la amistad social y la fraternidad universal tendiendo puentes y no levantando muros” en “una era neopagana”, como señalaba el entonces cardenal Ratzinger. Una “Iglesia en salida que debe ir a buscar” a quien está fuera para anunciar a Jesús.
Sobre la propuesta de ley de convivencia civil, del Río ha remitido a las palabras de Víctor Fernández. Y es que, recuerda el canonista des Río, “ser homosexual o mantener relaciones homosexuales no es motivo de excomunión”. El obispo también destacó que el Magisterio no se suele cambiar a través de entrevistas, ya que cuenta con otros medios. Para el prelado, con estas palabras “el Papa no se aleja de la doctrina de la Iglesia sino que lo aplica a un caso concreto aplicando el evangelio y la Tradición” con la dignidad de la persona y la misericordia en el centro.
Comentando una declaración de 1975 de la Congregación de la Doctrina de la Fe, señala que se pide ya el acompañamiento y la acogida de las personas homosexuales en sus dificultados, algo que se repitió en la declaración de los años 80. La acogida, el respeto y la falta de discriminación han sido una constante en el Magisterio de la Iglesia de las últimas décadas. Algo que no va contra las veces en que Francisco ha tomado distancia de la llamada doctrina de género.
