Este domingo 25 de octubre, al finalizar el rezo del ángelus, el papa Francisco dio a conocer que el próximo 28 de noviembre se llevará a cabo un nuevo consistorio, en el que se impondrá el birrete a 13 nuevos cardenales, entre ellos, al obispo emérito de la diócesis de san Cristóbal de las Casas, Felipe Arizmendi Esquivel.
Tras darse a conocer la noticia, la Iglesia en México expresó su regocijo: “Con gran alegría hemos acogido hoy dentro del Episcopado Mexicano y en el pueblo de Dios que peregrina en México, el anuncio del Santo Padre Francisco, hecho después del rezo del Ángelus”.
A través de un comunicado firmado por el presidente del organismo, el arzobispo Rogelio Cabrera López, el Episcopado Mexicano señaló: “Oramos al Señor y a Santa María de Guadalupe, para que derramen abundantes bendiciones sobre monseñor Felipe Arizmendi Esquivel, y siga haciendo muy fecundo su ministerio para bien de toda la Iglesia”.
Nació el 1 de mayo de 1940 en Chiltepec, Estado de México (entonces Arquidiócesis de México, hoy Diócesis de Tenancingo).
Hizo sus estudios humanísticos y filosóficos en el Seminario de Toluca, del que fue fundador. De 1959 a 1963, se especializó en Teología Dogmática, en la Universidad Pontificia de Salamanca, España.
Fue ordenado presbítero el 25 de agosto de 1963 en Toluca. Fue Vicario Parroquial en tres Parroquias (urbana, campesina y minera).
De 1967 a 1970 se desempeñó como párroco de una Parroquia otomí. Profesor del Seminario por 20 años y Rector por diez.
San Juan Pablo II lo nombró Obispo de Tapachula el 7 de febrero de 1991, donde fue ordenado el 7 de marzo de 1991. Después fue nombrado Obispo de San Cristóbal de Las Casas el 31 de marzo del 2000 por San Juan Pablo II, e inició su ministerio el 1 de mayo de 2000.
El 1 de mayo de 2015, al cumplir 75 años de edad, Felipe Arizmendi Esquivel presentó al papa Francisco su renuncia, misma que le fue aceptada el pasado 3 de noviembre. Desde entonces se encuentra radicando en el Estado de México.