Una homilía ante un grupo de jóvenes del vicario general de la diócesis de Macerata-Tolentino-Recanati-Cingoli-Treia, Andrea Leonesi, se ha vuelto viral y polémica. Comentando una noticia de Polonia, con un tono que parecía ser un tanto negacionista del problema de los abusos sexuales en la Iglesia, el sacerdote invitaba a un mayor compromiso por el aborto y dudaba del alcance de los problemas generados por la pederastia. El obispo Nazzareno Marconi ha salido al paso matizando las palabras del vicario, aunque manifestándose en el mismo sentido.
“Con el lenguaje provocador del pensamiento y la reflexión, típico de una homilía, el padre Andrea advirtió contra una mentalidad imperante hoy en día que nos hace mirar con razón el drama de la pedofilia como una batalla en la que todos deben vernos implicados, pero que no nos moviliza de la misma manera para garantizar a todas las mujeres el derecho a no abortar”, clarificó el obispo.
“Si el aborto es la única opción concreta que se le deja incluso a una sola mujer, porque toda la sociedad no ha hecho todo y más para ayudarla, esto no es civilización, sino barbarie. Esto es especialmente cierto para aquellos que se declaran cristianos, de hecho laicos comprometidos, como los jóvenes de la FUCI (Federación Universitaria Católica Italiana) a los que se dirigía el padre Andrea”.
A quienes han magnificado la polémica, el prelado recomienda “a ciertos críticos la corrección científica de criticar un acto comunicativo como una homilía, muy diferente de un mitin, conociendo bien el género literario y los textos bíblicos y eclesiales a los que se hace referencia. Los que estaban en la iglesia, culturalmente bien preparados como los jóvenes de los FUCI, entendieron bien las palabras del padre Andrea y no presentaron ninguna crítica”, sentencia.