En declaraciones a AICA, el obispo auxiliar de La Plata y titular de la Comisión Episcopal de Salud, habló sobre el nuevo proyecto de ley sobre el aborto que el Presidente de la Nación envió al Congreso para su consideración y eventual aprobación.
Bochatey recordó que, a dos días de asumir —en diciembre de 2019—, el nuevo gobierno presentó el protocolo de aborto que se efectivó en el 90% de jurisdicciones nacionales, a través del ministro de Salud Ginés González García. Por tal motivo, el obispo aseveró: “el aborto ya se está haciendo en la Argentina”.
Destacó que la ley es algo ideológico por los pactos y compromisos que el gobierno tiene con los grupos proaborto y los grupos LGTB, pero el aborto no es sólo un problema político, sino también humano, social y antropológico, entre muchas dimensiones.
El auxiliar de La Plata comentó “Hemos estado todo el año escuchando que primero está la vida, paramos el país, se destruyó la economía, fue un sacrificio muy grande… que se estaba cuidando es la vida de todos los ciudadanos”. Ahora surge esta contradicción: “hacemos una ley para eliminar vidas de seres humanos, por criterio de los adultos. Lo que habría que hacer es una ley para que la madre y el padre no generen vidas forzadas”.
Cabe recordar que en el 2018, la ley de interrupción voluntaria del embarazo fue considerada por el Parlamento y rechazado en favor del cuidado de la vida.
Con respecto a esta presentación de este proyecto para un tratamiento legislativo, el obispo expresó que “se va a introducir por primera vez en la historia jurídica de la Argentina una ley en democracia que contiene la muerte de un ser humano. Hay un cambio en la tradición jurídica argentina, y la historia nos enseña que nunca ningún problema social fue solucionado eliminando la vida de otro”.
Bochatey consideró que este proyecto es una “falta de respeto a la antropología del cuerpo, de la procreación y de la sexualidad”. Opinó que es un tema ideológico que se quiere imponer, y un tema sociológico.
Por su parte, expresó que la Iglesia tiene su posición sobre el aborto, desde hace siglos. El Papa y los obispos siempre se han manifestado al respecto. Pero no se trata de un tema eclesial, sino de un tema de la ciudadanía.
Finalmente, el titular de la pastoral de la salud, señaló que espera que los legisladores respeten criterios cívicos, sean creativos y busquen otro tipo de soluciones; “no una ley democrática que introduzca por primera vez en la historia la muerte de alguien”.