“La Navidad es la fiesta del amor, la fiesta de la fraternidad, la fiesta de la paz. Esta paz, busquémosla todos”. Así reza el Mensaje de Navidad 2020 de la Conferencia Episcopal Haitana, que finalizó ayer su Asamblea Plenaria. Y es que el país “necesita más que nunca la salvación, la redención, la paz, la transformación profunda: transformación de las mentalidades, de las estructuras, de la forma de gobernar y de hacer política”, agregaron.
Los obispos de Haití se muestran consternados “por el empeoramiento de la situación en el país, que se hunde cada vez más en la violencia, la miseria y la insalubridad”. De hecho, hablan de un envenenamiento de la vida social “debido a la proliferación de actos de secuestro, bandidaje, violación, asesinato y barbarie que siembran el terror, la muerte y el duelo”, según recoge Vatican News.
Asimismo, los prelados claman: “¡No al caos! No a la violencia, no a la inseguridad, no a la miseria, ¡ya hemos tenido suficiente! ¡El pueblo haitiano está harto! ¡Basta ya!”.
Esta Navidad “dejémonos transformar por el Niño Dios que en los brazos de su Madre, la Santísima Virgen María, nos sonríe y nos invita a no desanimarnos, a abrirnos a la gracia de Dios, a la Esperanza”.